La Liga y la Champions volvieron después del parón de selecciones y desde entonces el Real Madrid no acababa de dar con la tecla. La victoria no llegaba y fue ante el siempre complicado Sevilla cuando los blancos pudieron sumar los tres puntos. Triunfo por la mínima después del gol de Bono en propia puerta, aunque el tanto llegó por la presencia de Vinicius y él mismo asegura que es cosa suya.

El brasileño se encargó de hablar a pie de campo ante el micrófono de Movistar LaLiga. El jugador no acabó de entender por qué el gol no se le habían apuntado a él y sí a Bono en propia portería. "El gol es mío, claro. Yo golpeo a la portería y el gol es nuestro", explicó el '20' blanco aún en la banda del Sánchez Pizjuán.

Vinicius fue la electricidad en persona. Ya a las primeras de cambio, cuando incluso algunos aficionados no habrían ni sintonizado el partido, el jugador tuvo el gol. Sin llegar el crono al minuto 1, 'Vini' había puesto ya contra las cuerdas al guardameta del Sevilla y a toda la zaga con un disparo cruzado que se fue fuera por muy poco.

Poco después tuvo una nueva ocasión de batir a Bono, esta vez en la acción también estaba un Benzema que tampoco pudo batir al cancerbero rival. El Sevilla se salvaba por momentos, mientras que el Real Madrid bailaba al son que ponía Vinicius Júnior sobre el terreno de juego.

Finalmente, el gol para los merengues llegó y lo hizo con, cómo no, 'Vini' como gran protagonista. Benzema firmó una bonita acción individual para abrir el balón a banda y que fuese Ferland Mendy el que pusiera el esférico dentro del área. Ahí se encontraba el brasileño, quien asegura que toca la pelota para hacer gol, aunque sea Bono el último en estar en contacto con ella.

Sea como fuere, lo que ha demostrado el ex del Flamengo es que con él, el Real Madrid es, como mínimo, más temible. Su velocidad por banda pone en aprietos a las defensas rivales y si a eso se suma que en el otro flanco se sitúa otra bala como Rodrygo, el peligro aumenta.

En cuanto a estos dos jugadores, hay una estadística que merece la pena destacar. En cinco ocasiones han jugado Vinicius y Rodrygo como titulares a la vez en el equipo blanco. El resultado: ni una sola derrota. Victorias ante Espanyol, Brujas y Sevilla, además de los empates frente Athletic y Real Sociedad. Química.

No hay debate

Vinicius tampoco se ha superado por un camino de rosas hasta llegar hasta aquí. El brasileño tuvo que superar una grave lesión en su primera temporada de blanco, precisamente justo cuando mejor estaba. Después de recuperarse, había perdido su sitio, con cambio en el banquillo incluido.

Sin tantos minutos como desearía y sin demostrar esa chispa que tiene con el balón en los pies, el jugador perdió su característica sonrisa. Aunque la fue recuperando cuando volvía a vestirse de corto y a disfrutar en el campo. Después de un año difícil para todos, 'Vini' sigue demostrando que puede ser importante en este equipo.

759 minutos, 15 partidos, 3 goles y 1 asistencia son los números que firma Vinicius en esta recta final de la primera mitad de la temporada. Eso sin contar este tanto ante el Sevilla que LaLiga ha dado a Bono en propia. El carioca se acerca a la barrera de los 1.000 minutos y eso va de la mano de una importancia mayor en el Real Madrid.

La lesión de Hazard le vuelve a abrir las puertas de la titularidad, así como las dudas que para muchos continúa despertando Asensio con su rendimiento. Mientras las incógnitas sobre uno y otro no se acaban de despejar, Vinicius pone marcha directa hacia el cupo de innegociables de este Madrid de Zidane, en el que tan solo no ha jugado ni un solo minuto del partido ante el Betis.

Velocidad, peligro... Vinicius dota al equipo blanco de mucha personalidad en ataque. Algo que necesita el Real Madrid si quiere conseguir los objetivos durante la 2020/2021. Ante las últimas imágenes que han dado, los madridistas deben seguir el ejemplo de un 'Vini' que no solo no baja los brazos, sino que lucha para poner al servicio del conjunto merengue sus mejores cualidades.

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