La llegada de Kylian Mbappé al Real Madrid fue posible hasta el último momento, aunque el PSG siempre mantuvo una postura distante con respecto a la posibilidad de que el jugador terminase saliendo de París. El mensaje de Leonardo de que dejarían marchar al delantero galo bajo sus condiciones no se terminó cumpliendo, así como faltaron a la palabra que le dieron al futbolista cuando llegó a la capital francesa hace cuatro años donde le prometieron que le dejarían ir en una situación como la que se ha dado en estos días finales del mercado de traspasos.
Ahora L'Equipe ha desvelado cómo se produjeron esos últimos movimientos y las conversaciones que se llevaron a cabo para terminar rechazando las ofertas que hizo el Real Madrid por Mbappé. La realidad es que todo se resolvió en Catar. Nasser Al-Khelaïfi estuvo junto a Tamim bin Hamad Al Thani y, según el medio, estuvo atendiendo a los pros y las contras de la venta del jugador, pero había una idea por encima de todas.
"No era cuestión de privarse de la oportunidad de vivir una temporada con el trío soñado Messi-Mbappé-Neymar. Incluso si significa sentarse en una oferta XXL y en la simple voluntad de su goleador", explica L'Equipe. Lo que ellos han considerado "el final de una divertida telenovela" estuvo supeditado a la idea del emir de que sus tres estrellas jueguen juntas al menos una temporada, porque esa propuesta descomunal que le hicieron para renovar su contrato fue rechazada.
Según la prensa francesa, Kylian Mbappé rechazó una oferta de 45 millones de euros netos al año para renovar con el Paris Saint-Germain. Se colocaba como el mejor pagado, pero el de Bondy dio otra negativa más. La intención del PSG es quedarse con el francés, pero este parece determinado a salir. Al acabar contrato el 30 de junio de 2022, con el inicio de este próximo año la norma le permitirá negociar libremente su próximo destino. Ahí no habrá ni emires ni jeques, será el jugador el que decida.
"No fichaje"
L'Equipe titula "Kylian Mbappé en el Real Madrid, el no fichaje del siglo" para vender esta información. Este mercado de fichajes será recordado para siempre como el que un jugador que se quería ir se quedará una temporada más. Un club rechazó 200 millones por un futbolista que acaba contrato al año siguiente y que ha demostrado que no quiere renovar. Es un nuevo paradigma en el mundo del fútbol al que nadie se había enfrentado, aunque lo de Neymar y el Barça fue un preludio en 2019.
En cualquier caso, hubo dudas. Así lo dice esta información. Entendían la importancia capital del jugador francés a todos los niveles, pero dadas las ofertas blancas y la amenaza de salir gratis en su fin de contrato, hubo voces que optaron por vender. Fue una decisión de un Estado, que quiere mostrar músculo justo antes de organizar el Mundial más excepcional de la historia.
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