Eduardo Camavinga vivirá dos días para recordar esta semana. El priemro fue el de su presentación con el Real Madrid y el segundo apunta a ser el de su debut como jugador del equipo merengue. El centrocampista francés ha conseguido entrenar varios días con el grupo y a la vista del calendario y el cansancio puede ser una pieza clave. Su hora en el club merengue ha llegado.
El fichaje de Camavinga, cabe recordar, estaba en el horizonte del Real Madrid desde hacía tiempo. Sin embargo, todas las miradas apuntaban a 2022 tras su negativa a renovar con el Rennes. El cuadro galo se abrió a negociar y en el tramo final del mercado de fichajes se alcanzó un acuerdo exprés. Cerrado el traspaso, hecho oficial y tras una breve presencia con la sub21 de Francia, Camavinga puso rumbo a la capital.
Su convocatoria con la selección gala, además, no supuso ningún problema. Terminó a tiempo y pudo sumarse a los entrenamientos de Carlo Ancelotti con un objetivo: llegar en condiciones de debutar contra el Celta. Una situación que, salvo sorpresa, se producirá este mismo domingo en el Santiago Bernabéu. A sus 18 años, el medio francés jugará sus primeros minutos como nueva estrella de la entidad.
Camavinga tendrá un examen complicado. Principalmente porque no solo jugará sus primeros minutos con el Real Madrid, sino que lo hará en la noche del estreno del Santiago Bernabéu tras más de un año y medio cerrado, sin albergar partidos y sin contar con público por la pandemia y las obras de remodelación. Pero, además, el galo también se verá obligado a destacar el por qué de su fichaje.
El centrocampista despuntó en el Rennes hace dos temporadas. Nada más dar sus primeros pasos en el fútbol de élite, con 16 y 17 años, Camavinga se ganó un hueco entre los principales rostros de la Ligue-1. Sin embargo, estos últimos meses no han sido muy favorables y su rendimiento acabó por caer. Una situación que no alejó su fichaje por el Real Madrid y que ahora tendrá la oportunidad de reconducir. De hacerlo, borraría todas las dudas y supondría todo un golpe del club en el mercado.
Cansancio en la medular
Camavinga puede converirse en el comodín perfecto de Carlo Ancelotti, que esta jornada iba a ver muy dañado su esquema en el centro del campo. El tridente habitual del Real Madrid lo venían formando Casemiro y Valverde tras las lesiones de Kroos y Modric. Y tanto el brasileño como el uruguayo habían cumplido con creces. Pero esta jornada, con parón de selecciones incluido, daba poco margen de descanso a los jugadores.
Por si fuera poco, Modric simplemtente ha podido realizar unos pocos entrenamientos, por lo que forzarle ante el Celta sería toda una temeridad. Teniendo en cuenta que el próximo miércoles toca debutar en Champions ante el Inter, jugársela a perder a un jugador clave no está entre los planes del técnico del Real Madrid.
Un combo de situaciones que darán a Camavinga su sitio en el equipo merengue esta jornada. Un remedio contra el virus FIFA y un examen sobre la idoneidad de su fichaje epor el Real Madrid este mismo verano.
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