La tradicional gala de la FIFA, en la que se entregan los Premios The Best del año, tuvo como protagonistas a Robert Lewandowski y la española Alexia Putellas, ganadores en categoría masculina y femenina respectivamente. También se conocieron los elegidos para formar parte del XI FIFPro y ahí es donde encaja el nombre de David Alaba.

El defensa de Austria ingresó por vez primera en su carrera en este particular once ideal de la FIFA. Y esto después de ganar con el Bayern Múnich la pasada temporada el Mundial de Clubes, la Supercopa de Europa, la Bundesliga y la Supercopa de Alemania. Este 2022 ha comenzado también de una manera triunfa para él, al haber logrado su primer título como jugador del Real Madrid al conquistar la Supercopa de España.

Alaba fue, además, la principal novedad del equipo blanco en la final de la Supercopa de España de fútbol. Se perdió El Clásico contra el Barcelona de semifinales por unas molestias físicas que le hicieron ser baja de última hora. Pero se recuperó a tiempo y pudo jugar desde el inicio frente al Athletic Club. Una gran noticia, en especial para Carlo Ancelotti.

El entrenador italiano le dio la batuta de la defensa madridista desde su llegada. Ambos aterrizaron en el estadio Santiago Bernabéu el pasado verano. Sin Sergio Ramos ni Raphaël Varane, David Alaba ha confirmado el porqué es considerado como uno de los mejores zagueros de todo el mundo.

Sin complejos, sin miedos y con confianza y calidad, el internacional austriaco es uno de los innegociables en el conjunto merengue. Y eso que tan solo ha pasado medio año de su fichaje. Un fichaje que se puede decir sin temor a equivocarse que es 'The Best' para el Real Madrid.

Después de perder a los ya mencionados Ramos y Varane, contar con un defensa de la experiencia de Alaba fue como un soplo de aire fresco. El propio jugador, que también puede jugar en el lateral izquierdo o incluso de pivote defensivo, no dudó en firmar por la entidad blanca una vez entró en el último año de su contrato con el Bayern Múnich.

Mucho Alaba

Pese a su larga trayectoria, no será hasta el próximo mes de junio cuando Alaba cumpla 30 años. Esto no quiere decir otra cosa que todavía le quedan por delante varios años buenos de fútbol. Al más alto nivel. Y este nivel es el que está dando desde que desembarcó en el Santiago Bernabéu.

Superada la barrera de los 2000 minutos y abierto el casillero individual tanto de goleador como de asistente este curso. Alaba es presente y futuro. Sus compañeros confían en él y ya es uno más del vestuario. Sabe lo que quieren de él y no duda en brindárselo: "Intento ayudar al equipo con mis cualidades. Es lo que quieren de mí, que esté ahí. Intento trabajar y mejorar mucho". David Alaba ha caído de pie en la casa blanca. El fichaje del año... y sin olvidar que a coste cero.

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