1-0. Derrota del Real Madrid en París, pero un resultado bastante benévolo para lo que pudo haber sido para los pupilos de Carlo Ancelotti. El PSG hizo lo suyo, pero hasta el descuento se topó con un muro blanco conformado por cuatro futbolistas: Casemiro, David Alaba, Éder Militao y un heroico Thibaut Courtois. El equipo regresó a casa sin nada que achacar a estos cuatro futbolistas.
Decir que el Real Madrid tiene al mejor portero y a la mejor pareja de centrales del mundo no es una exageración tras lo de este martes. A eso hay que sumar la presencia de Casemiro como uno de los pivotes más dominantes del planeta fútbol durante el último lustro. El brasileño estuvo errático en la salida de balón, pero en lo que se le exige estuvo impoluto. Una amarilla le deja sin la vuelta y eso es motivo de preocupación.
Ancelotti deberá buscar solución para la dolorosa baja de Casemiro en el Santiago Bernabéu. El triángulo que forma el carioca con su compatriota Militao y Alaba sostiene al equipo, como se pudo ver en casi todos los momentos críticos del choque de París. A Case se le vio 'secar' a Leo Messi y los centrales fueron los únicos que pudieron plantar cara a Kylian Mbappé entre el bando madridista.
Militao y Alaba no dejan de crecer. La sintonía entre el brasileño, que hace algo más de un año era el cuarto central del equipo, y el austriaco, aterrizado en Madrid hace solo unos meses, es total. Dos jerarcas que pudieron centrarse en el Parque de los Príncipes en ayudar a las bandas. Dani Carvajal le debe una a Militao por sus constantes ayudas durante sus 70 minutos en el campo y solo un desajuste de Lucas Vázquez, el cambio de Ancelotti, provocó el tanto de la victoria en el minuto 94.
Heroico Courtois
Lo de Courtois es de analizar por su propia cuenta. El belga hizo una de las mejores actuaciones de un portero del Real Madrid que se recuerden en competición europea. Ocho disparos a puerta del PSG y siete paradas de Thibaut, que no pudo hacer nada cuando Mbappé, tras una genialidad, se plantó frente a él en la última acción del partido.
A Kylian le ganó el duelo en la primera gran ocasión del partido, la única clara de la primera mitad. En la segunda parte se le multiplicó el trabajo y solo dio signos de seguridad absoluta. Detuvo varios tiros lejanos con solvencia, despejó un tiro envenenado de Mbappé mostrando sus reflejos y, lo más importante de todo, detuvo un penalti a Messi.
Así le ganó la batalla al argentino: "He estudiado bastante los penaltis de Messi: le vi algunos en el Barça y aquí en la Liga de ellos. Ha fallado tres a la derecha, y los otros los había metido cruzado. Era jugar un poco con él en la línea e ir a la izquierda. Obviamente, también es un poco de suerte tirarme ahí, pero es bueno para mantenernos en el partido. Por eso, encajar en el último segundo es duro", analizaba tras el partido.
El 1-0 da una clara ventaja al PSG contra el Real Madrid para la vuelta, pero no todo está perdido para los blancos. La respuesta la tendrán que dar los futbolistas de arriba (con Benzema y Vinicius desconectados en París), los laterales (señalados en la derecha y sin Mendy para la vuelta) y Ancelotti con un renovado planteamiento. Courtois, Militao y Alaba (y Casemiro, pero estará sancionado) cumplieron con creces con lo suyo.
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