El Real Madrid afronta un partido trampa en su visita a Mallorca por muchos aspectos. El primero y fundamental, su situación en el campeonato. Se enfrentan el líder contra el decimosexto de la tabla que, además, viene de una racha de cuatro partidos consecutivos perdiendo. Por ello, la visita del mejor conjunto de La Liga es una oportunidad trascendental para darle la vuelta a la situación. El choque arrancará a las 21:00 horas y será dirigido por José María Sánchez Martínez. En el VAR estará David Medié Jiménez.
Los blancos llegan con la obligación evidente de sacar los tres puntos porque así se lo dicta su escudo, su historia y la exigencia habitual que rodea la camiseta blanca. Pero además, una victoria podría suponer un golpe definitivo a La Liga. Tras el pinchazo del Sevilla de Julen Lopetegui ante el Rayo Vallecano, los blancos se juegan la oportunidad de abrir diferencias por segunda jornada consecutiva.
Ya lo hicieron en la pasada, cuando su goleada ante la Real Sociedad sirvió para dejar a los hispalenses a ocho puntos. Ahora, un triunfo ante el equipo de Luis García Plaza abriría la renta hasta los diez puntos con solo 10 jornadas por disputarse. Una situación inmejorable para empezar a saborear ya el título y centrarse de lleno en la Champions.
Existe otra circunstancia por la que además, el choque será un poco inusual. El Real Madrid no está acostumbrado a jugar en lunes, y eso podría pillar un poco desprevenida a la plantilla madridista. Este tipo de cosas parecen no tener importancia, pero dentro de una temporada donde todo está medido, cambiar los hábitos de días, como sucede con las rutinas de partido, puede jugar malas pasadas.
El Mallorca intentará aprovecharse de esa situación aunque el conjunto de Carlo Ancelotti sabe que no tiene excusa. Sea viernes, sábado, domingo o lunes, deben ganar para asestar un golpe casi definitivo a sus más inmediatos perseguidores. Tres puntos que pueden valer un colchón de paz y tranquilidad después de atravesar semanas convulsas.
El último condicionante que marca el choque del Visit Mallorca Estadi es la euforia que arrastran los blancos. Vienen de su noche épica e histórica ante el PSG y es difícil encontrar motivación para partidos que, lógicamente, ponen menos tanto a los jugadores como a los aficionados. Que el rival pague esa resaca de gran noche europea podría ser uno de los motivos de esperanza a los que se agarren los locales.
No obstante, el Real Madrid debe centrarse ahora en La Liga ya que vienen semanas que serán claves. Ganar al Mallorca significará afrontar El Clásico del próximo fin de semana de nuevo en la cresta de la ola como ya sucedió en las semifinales de la Supercopa de España. Y una derrota o un pinchazo supondría volver a las dudas de antaño.
Dudas con el once
Carlo Ancelotti no tiene bajas en su plantilla y posee a todos sus jugadores descansados ya que han tenido un día de recuperación más de lo habitual. Casemiro y Ferland Mendy vuelven tras perderse el duelo ante el PSG de Champions por sanción. Ambos apuntan a la titularidad. Una de las dudas podría ser si el italiano decide dar descanso a Toni Kroos, que llegó entre algodones a la batalla europea.
La otra duda se sitúa en la delantera. Con Karim Benzema y Vinicius como fijos e inamovibles, la disputa por el extremo derecho está completamente abierta. Marco Asensio parte con ventaja y además regresa a casa. El mallorquín ya hizo tres tantos en la goleada de la ida. Pero Rodrygo se ganó una oportunidad tras su fulgurante aparición en la remontada ante el PSG. Una recuperación suya trajo el tercer gol.
Un Mallorca muy necesitado
Por su parte, el Mallorca buscará dar la sorpresa ante el líder de la competición y aprovecharse de esa ola de optimismo y euforia que trae para bajarle de nuevo a la tierra. Los de Luis García Plaza se encuentran en la lucha del descenso con solo dos puntos de margen sobre el Cádiz y cuatro sobre el Alavés. Una derrota ante los blancos les podría meter en un buen lío.
En cambio, una victoria les permitiría adelantar al Getafe que no ha ganado ninguno de sus últimos cinco partidos. Eso sí, los bermellones acumulan cuatro derrotas consecutivas y una quinta podría añadir más crispación a la temporada de uno de los modestos de La Liga.
El choque será muy especial, lógicamente, para Takefusa Kubo. El japonés está cedido por el Real Madrid y todavía no sabe qué pasará con él la próxima semana. Una buena actuación podría hacerle ver a la dirección madridista que tiene hueco de cara a la temporada 2022/2023.
El quipo balear no podrá contar con el portero Manolo Reina ni con Battaglia por sanción. Ni obviamente con Ruiz de Galarreta, baja de larga duración tras la grave lesión de rodilla que sufrió contra el Real Betis. Quien sí estará será el internacional francés Clement Grenier, fichado a última hora para suplir la baja del mediocentro eibarrés.
RCD Mallorca - Real Madrid
RCD Mallorca: Sergio Rico; Maffeo, Raíllo, Valjent, Jaume Costa; Antonio Sánchez, Baba, Dani Rodríguez; Take Kubo, Muriqi y Lee Kang-In.
Real Madrid: Courtois; Carvajal, Militao, Alaba, Mendy; Kroos, Casemiro, Modric; Asensio, Benzema, Vinicius Jr.
Árbitro: José María Sánchez Martínez (Comité murciano).
VAR: David Medié Jiménez (Comité catalán).
Hora: 21:00 horas.
Estadio: Visit Mallorca Estadi.
[Más información: Posible alineación del Real Madrid para el partido de la jornada 28 de La Liga ante el RCD Mallorca]