Carlo Ancelotti tiene muy claro su esquema en el Real Madrid. El técnico italiano sabe a lo que quiere jugar y para ello tiene a su disposición una amplia plantilla en el conjunto blanco. Por desgracia, no puede jugar todos y muchos de ellos no pueden disputar todos los minutos que querrían.

Es el caso de futbolistas como Eden Hazard, Marco Asensio y Antonio Rüdiger. De primeras, suelen ocupar el lugar del banquillo. Un sitio que poco les gusta a ellos y más cuando han contado con el papel de estrellas las últimas temporadas. Pero pueden haber encontrado una oportunidad para lucirse sobre el terreno de juego.

Las selecciones les brindan la oportunidad de lucirse todo aquello que no han podido con el Real Madrid. Asiduos a ellas, algo que no encuentran en las filas blancas, tienen prácticamente un lugar importante dentro de los esquemas de los seleccionadores. Un sitio donde pueden encontrar de nuevo la alegría.

[La encrucijada de Hazard: sin lesiones y sin Benzema, pero igual de secundario]

Especialmente doloroso es el caso de Hazard y Asensio. Los dos se han visto relegados de manera constante en este inicio de temporada a ver con el chándal los partidos. Si acaso, visten la equipación en el tramo final de los encuentros cuando saltan al campo para dar descanso a alguno de sus compañeros.

Entre los dos, dos titularidades. Las sumadas por el belga en el partido de Champions League frente al Celtic de Glasgow y frente al Mallorca en un encuentro de Liga. Y también circunstanciales, la lesión de Benzema obligó a recurrir a él al no haber un sustituto de garantías del francés entre los suplentes. El español, ni eso. 

Algo más halagador ha sido el panorama para Antonio Rüdiger. El central llegó con el cartel de fichaje estrella al conjunto blanco en verano y, de momento, le está costando hacerse un hueco entre los once elegidos. La dupla Alaba-Militao se mantiene prácticamente intacta, salvo las rotaciones que decide Ancelotti. En esos momentos, es cuando puede rascar más minutos el defensa. Algo que no pasa en Alemania, donde es indiscutible para su seleccionador. 

Fijos en su selección

Solamente las lesiones han apartado a los tres de estar convocados con España, Bélgica y Alemania. Tanto Asensio, Hazard y Rüdiger son jugadores muy del agrado de los entrenadores. Hecho que les motiva para intentar reivindicarse cada vez que viajan con sus equipos nacionales. 

En este nuevo parón, donde se disputan partidos amistosos y los correspondientes a la Nations League, han visto un oasis. Una puerta abierta a demostrar porqué son jugadores del Real Madrid y están en nómina en la plantilla. Un momento clave para volver a reclamar un puesto en once de Carlo Ancelotti.

En el caso de Rüdiger y Hazard, los dos ya han tenido la oportunidad de saborear una nueva titularidad. En los respectivos compromisos de Bélgica y Alemania han vuelto a saltar al césped para hacerse la foto de inicio, esa en la que todo jugador piensa semana a semana. 

[Hazard: "Me siento bien en el Real Madrid, pero quiero jugar y no juego"]

A pesar de tener resultados dispares, los diablos rojos ganaron a Gales y los teutones cayeron de manera sorprendente frente a Hungría, ambos volvieron a sonreír sobre el césped. Todo un alivio para ellos, demostrando que pueden rendir si se decide contar con su ayuda en las filas madridistas. Aunque, como se menciona antes, el caso de Rüdiger no es tan crudo como el de Hazard. 

El atacante belga pudo sumar muchos en comparación si se miran los datos sumados en este arranque. 65 minutos disputó en su regreso con la selección que dirige Roberto Martínez. En el Madrid sólo acumula 158 en los cuatro disputados, es decir, poco más del doble de lo que ha sumado en un único encuentro con Bélgica. Una alegría más que sumó al triunfo de los suyos frente a los galeses (2-1).

[La anécdota de Rüdiger con Ancelotti en su primer día en Madrid: "Sonó el timbre y estaba él"]

Por su parte, Rüdiger completó los noventa minutos de manera satisfactoria frente a los húngaros (0-1). Lo único malo para él fue la derrota inesperada. Aún así, pudo disfrutar de la confianza de Hansi Flick. Un rodaje que le permite mantenerse en forma para este tramo decisivo de la temporada, donde podrá tener más oportunidades sobre el césped. 

Asensio, siempre con Luis Enrique

El papel de Asensio se ha visto radicalmente reducido en el Real Madrid. Su intención de marcharse del club gratis provocó que le pusieran a la venta en verano. No quiso irse durante el mercado y todo hace indicar que no seguirá vistiendo la elástica madridista.

[Asensio presiona al Real Madrid con el Barcelona: la estrategia de Mendes]

Lo que si es seguro es que no está jugando apenas con Ancelotti. Pese a mandarle mensajes de que todavía confía en él, lo cierto es que ha quedado relegado completamente a los llamados minutos de la basura. Un papel que no gusta Asensio ni a ningún futbolista, y mucho menos con su cartel y jugándose un juego contrato el próximo verano. 

El mallorquín parece haber encontrado un salvoconducto en con la Selección. Luis Enrique, entrenador fiel a sus principios e ideas donde los haya, parece seguir apostando por él aunque escaseen sus minutos. Esto le brinda una oportunidad de oro para poder brillar con la Roja. Y cada vez que va, lo suele hacer bien y sale cargado con un saco de minutos.

Esta vez tiene una misión añadida: ganarse el puesto para el Mundial de Qatar. Por delante dos enfrentamientos claves para él como lo son Suiza y Portugal. Dos oportunidades de oro para asentarse en la lista del seleccionador español y amarrar su puesto en el último parón antes de la cita mundialista. 

En sus últimos tres partidos con España tuvo un protagonismo destacado al sumar dos asistencias. Algo que espera repetir de nuevo. Al final, él está jugándose algo más que los minutos en el Real Madrid. Su futuro, cada día más incierto y lejos de la capital española, puede depender de todos esos momentos en los que salte al césped. Aunque sea mínima, una pequeña regularidad y con el Mundial de por medio, Asensio puede hacer cambiar de opinión tanto a su actual club como a otros en caso de ofrecerle una gran oferta. Eso sí, él y sus dos compañeros han encontrado un oasis en las selecciones.