Desalojan un chiringuito con 300 personas de fiesta
Agentes de la Policía Local de Málaga desalojaron la pasada noche del jueves un chiringuito de la zona de La Araña de la capital tras comprobar que no se cumplían gran parte de las medidas preventivas recogidas en el decreto de estado de alarma motivado por la pandemia por COVID-19, siendo la más grave de ellas el aforo, que cuadruplicaba el que debía tener, con unas 300 personas cuando el máximo en interior y terraza debería ser de 72.
Los hechos ocurrieron sobre las 23.10 horas de este jueves 18 de junio. Fueron varias las llamadas que se recibieron en la Sala 092 de la Policía Local de Málaga informando de que en un chiringuito de la playa de La Araña, concretamente en calle Escritor Alarcón Bonel, se estaba "celebrando una fiesta con gran multitud de personas en la que no se guardaba distancia social de seguridad".
Dos unidades de zona de la Policía Local de Málaga se desplazaron hasta el lugar nada más tener conocimiento de los hechos, comprobando los agentes mientras se acercaban cómo en los alrededores del chiringuito había una gran cantidad de vehículos estacionados, lo cual denotaba esa gran afluencia a un evento.
También percibieron que del establecimiento trascendía un fuerte sonido de música al exterior, siendo inmediatamente bajado el volumen al percatarse los organizadores de la presencia policial, según han informado desde la Policía Local en un comunicado.
Al llegar a la entrada, los policías locales comprobaron in situ que se estaban cometiendo "numerosas infracciones" tanto al decreto 463/2020, de 14 de marzo, por el que se declara el estado de alarma, como a la Ley 13/1999, de 15 de diciembre, de Espectáculos Público y Actividades Recreativas de Andalucía, destacando la presencia en el interior del local de unas 300 personas aproximadamente.
Según la Policía Local, el aforo máximo permitido del establecimiento es de 72 personas, ya que el local cuenta con permiso para 23, que en la actual fase 3 se ve reducido a 16, a lo que habría que sumarle la terraza de 70 metros cuadrados, que estaría habilitada para 20 mesas, o lo que es lo mismo, 80 personas, viéndose dicha cifra reducida en la actualidad a 14 mesas y 56 personas.
A ello se suma que no se guardaba la mínima distancia de seguridad, encontrándose todas las personas de pie, ya que no había sillas para sentarse, y estando incluso algunas de ellas bailando en esos instantes.
Los agentes se percataron de que el personal de vigilancia y control del establecimiento no portaba las correspondientes mascarillas de protección, no observándose tampoco a ningún empleado del local efectuando la limpieza y desinfección del equipamiento de la terraza y careciendo igualmente de gel hidroalcohólico tanto en la entrada como en el interior del recinto a disposición de los clientes. Asimismo, el establecimiento carecía de documento identificativo de la Junta de Andalucía.
Otro de las infracciones que fue motivo de denuncia por parte de la Policía Local de Málaga fue el hecho de que tuvieran música a un volumen muy alto e incluso una mesa de mezclas para DJ a pesar de no contar con permiso para ello, ya que la licencia del local es de bar-cafetería con cocina y sin música.
"Se nos ha ido de las manos"
Ante las numerosas irregularidades, los policías locales identificaron al encargado del establecimiento y organizador el evento, un hombre de 32 años que manifestó a los agentes que se trataba de una fiesta privada consistente en una jornada de degustación gastronómica a la que habían acudido más personas de las que esperaban, viéndose desbordados por la situación y manifestando literalmente que "se les había ido de las manos".
Los policías locales le hicieron entrega de las correspondientes actas de denuncia, procediendo al desalojo del establecimiento, que se hizo de forma ordenada y con la precaución y medidas oportunas, quedando totalmente desalojado a medianoche, siendo varios los clientes que manifestaron a los propios agentes que habían vivido situaciones descontroladas de masificación de personas en el interior, con el consiguiente riesgo de contagio de COVID-19 e incluso la disminución de las condiciones de seguridad para los asistentes.
Además, la Policía Local de Málaga practicó este jueves 242 intervenciones en establecimientos con el fin de garantizar el cumplimiento de las medidas de seguridad decretadas por el Gobierno central, por lo que se contabilizan un total de 9.903 intervenciones desde que comenzasen a practicarse a partir de las fases de la desescalada.
A la denuncia del chiringuito, se unen las de dos establecimientos más que fueron sancionados a lo largo de la noche en la ciudad por superar el aforo máximo permitido, además de incumplir otras medidas de seguridad relativas al decreto de estado de alarma, uno en calle Mendoza y otro en paseo marítimo de Pedregalejo, siendo ambos desalojados y denunciados por los policías locales que llevaron a cabo las respectivas actuaciones.
Los agentes locales, en las últimas 24 horas, han denunciado a un total de 46 personas por el incumplimiento de las medidas preventivas, 39 por no usar mascarillas y el resto, siete, por incumplir el distanciamiento social. En total han sido 10.642 personas denunciadas desde que comenzaran a aplicarse las medidas preventivas derivadas del decreto de estado de alarma del pasado 14 de marzo.
En estos días, no se ha producido ninguna detención por incumplimiento de las medidas decretas por el estado de alarma, por tanto, el número de arrestos se mantienen en 15. En el turno de este jueves no se interceptó a ningún vehículo por circulación indebida, por lo que se mantienen la cifra total en 1.893 de vehículos denunciados por agentes de la Policía Local de Málaga.
Fruto de las actuaciones policiales, hasta las siete del día de este viernes, han sido identificadas un total de 76.413 personas, sumando las 375 identificaciones practicadas el día 18 de junio.