Ojo al multazo que han puesto en Castilla y León a los participantes en una fiesta
La Junta de Castilla y León ha tramitado casi un centenar de multas que suman casi 400.000 euros, entre ellas una de 126.000 euros para el organizador de una fiesta ilegal celebrada el pasado agosto en un pequeño pueblo de la comarca zamorana de Sanabria, con otros 3.001 para cada uno de los 91 asistentes.
La fiesta, convocada por redes sociales y celebrada en Vime de Sanabria, una localidad de 61 habitantes, congregó a más de un centenar de jóvenes procedentes de distintos puntos de España que se dieron cita en un terreno de las afueras del pueblo sin cumplir las medidas preventivas frente a la covid-19.
La delegada territorial de la Junta de Castilla y León en Zamora, Clara San Damián, ha anunciado este miércoles que por su participación en esa fiesta se ha impuesto una sanción de 126.000 euros a quien está considerado el organizador y 91 de 3.001 euros a cada una a los asistentes.
La fiesta, que fue desalojada por orden judicial el domingo día 9 de agosto por la tarde tras dos días de celebración, hizo que la Guardia Civil tramitara 162 sanciones contra 118 personas.
Además de las relativas a la prohibición de organizar eventos masivos que han sido tramitadas por el Gobierno regional castellanoleonés también se impusieron sanciones por tenencia de estupefacientes, acampada no autorizada o exceso de ruido, entre otras.
Clara San Damián ha explicado este miércoles tras la reunión del Cecopi (Centro de Coordinación Operativa Integrado) frente a la covid-19 que se han incoado la totalidad de las sanciones que han recibido por la participación en la fiesta.
San Damián ha indicado que las multas las ha tramitado la Dirección General de Protección Civil de Castilla y León y con ellas la ciudadanía debe saber que hay que cumplir las normas y puede comprobar que quien no lo hace tiene su sanción.
"Las bromas no las podemos pagar todos"
"Las bromas de algunos no las podemos pagar todos", ha declarado la delegada territorial de la Junta de Castilla y León en Zamora, que ha recordado que al no respetarse las medidas de prevención contra el coronavirus "nos la estamos jugando todos".
La fiesta se inició el día 7 de agosto por la tarde y, tras tener conocimiento de ella, la Guardia Civil estableció desde el primer día un dispositivo de control y se coordinó con la Junta de Castilla y León para solicitar el desalojo dos días después, cuando permanecían aún una treintena de personas en el evento.