Castilla-La Mancha protege Caraca, una joya arqueológica enterrada en Guadalajara

El yacimiento arqueológico del Cerro de la Virgen de Muela en Driebes (Guadalajara), donde estuvo situada la ciudad romana de Caraca, va a ser declarado Bien de Interés Cultural (BIC) con categoría de zona arqueológica. Será este mismo jueves, 9 de febrero, cuando el Diario Oficial de Castilla-La Mancha (DOCM), publique la incoación del expediente.

Este anuncio lo ha hecho la consejera de Educación, Cultura y Deportes, Rosa Ana Rodríguez, en una visita al yacimiento en el que ha destacado que "queremos proteger un bien de importante valor patrimonial para entender la historia de la provincia, así como de una ciudad, Caraca, olvidada con el paso de los siglos, que se caracterizó por su esplendor y su amplia población".

El yacimiento del Cerro de la Virgen de la Muela y su área arqueológica acogen un oppidum carpetano y la ciudad romana de Caraca. En 1945, cuando se acometieron las obras de canalización del canal de Estremera, fue hallado un deposito de plata que en la actualidad se expone en el Museo Arqueológica Nacional.

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Sin embargo, ha sido en la última década cuando los trabajos realizados han posibilitado identificar una ciudad romana que pudo alcanzar en época altoimperial una extensión de unas ocho hectáreas, según indican desde la Consejería. Primero con el reorradar y después con excavaciones arqueológicas, se ha posdido calcular que la ciudad estaba articulada a partir de 27 manzanas y posee foro, cardo, decumano, terman públicas y viviendas. 

Es probable que la ciudad fuera promocionada jurídicamente en época Flavia, teniendo su época de esplendor entre los siglos I y II d. C., existiendo ocupaciones precarias de época más tardía. No en vano, la ciudad de Caraca, citada por Plutarco, Ptolomeo y el Anónimo de Rávena, se encontraba ubicada en la vía que unía Cartago Nova y Complutum. Concretamente, entre esta última ciudad y Segóbriga.

A esta visita, también han acudido el presidente de la Cortes regionales, Pablo Bellido; el delegado de la Junta en la provincia de Guadalajara, Eusebio Robles; el presidente de la Diputación, José Luis Vega; y el alcalde de Driebes.

Alfombras de Alcaraz y Carnaval de Tarazona

En el club de los BIC han entrado esta semana las alfombras de nudo español de Alcaraz y el Carnaval de Tarazona de La Mancha, tras la resolución del Consejo de Gobierno. La consejera portavoz, Blanca Fernández, ha informado este miércoles que con estas dos incorporaciones, Castilla-La Mancha ya suma 669 BIC. 

En lo que se refiere a las alfombras de nudo español de Alcaraz, Blanca Fernández ha explicado que “es una de las artesanías más destacadas de la Comunidad Autónoma”, tanto que desde el siglo XIV al XVIII la producción de alfombras de Alcaraz fue muy importante y apreciada en toda España e incluso en Europa.

Con este reconocimiento se pretende contribuir a la recuperación de este oficio artesano que trajeron los árabes para la confección de alfombras y tapices en España desde la Edad Media “y entendemos que es una tradición que no se debe perder y estuvo a punto”.

Por lo que respecta al carnaval de esta localidad, la consejera ha destacado su carácter “divertido, participativo y con mucha, mucha tradición”. Tras contar el municipio con el Centro de Interpretación del Patrimonio Local y el Carnaval de Tarazona de la Mancha, ahora llega este reconocimiento porque “el Carnaval es una seña de identidad de la localidad que destaca por su singularidad, potencialidad y también por la alta participación, de hecho, hay 99 peñas”.

El municipio cuenta con sus famosas ‘mascarutas’, un atavío tradicional con una gran tela que cubre el cuerpo, cajas de cartón en la cabeza y máscara de tela en la cara.