Castilla-La Mancha sigue apostando por la jornada continua en los colegios a la contra de la decisión de Ayuso
Ningún centro educativo de la región ha pedido modificar el modelo pese a que una orden publicada en 2022 determina que pueden solicitarlo a la Junta.
17 septiembre, 2024 06:00La decisión de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, de imponer la jornada partida en los nuevos colegios públicos que se construyan en la región ha reabierto un viejo debate en el ámbito escolar. Sin embargo, en Castilla-La Mancha no seguirán los pasos de la presidenta madrileña.
Así lo ha confirmado este lunes el consejero de Educación castellano-manchego, Amador Pastor, durante su visita al IES Azarquiel de Toledo, donde ha reconocido que "no hay ningún interés en cambiar la jornada continua" en los centros.
"Es una cuestión que siempre han definido los propios centros educativos. Aquí se implantó la jornada continuada porque se vio el beneficio en el rendimiento del alumnado y de las familias", ha afirmado.
El modelo de jornada ordinaria en los centros de Castilla-La Mancha viene establecido por la Orden 121/2022 del 14 de junio, en su artículo 14, e indica que los centros podrán solicitar a la Junta la modificación de la jornada continua si así lo desean.
No obstante, fuentes de la Consejería de Educación han confirmado a EL ESPAÑOL – EL DIGITAL CLM, que ni un solo colegio de la comunidad ha pedido pasar a la jornada partida, ratificando que el modelo de jornada continua está más que consolidado en Castilla-La Mancha y la discontinua solo se da en algunos centros privados y concertados.
¿Qué dice la ciencia?
La jornada partida en los colegios comenzó a desaparecer en España a partir de los años 80, convirtiéndose con el paso de los años en la opción mayoritaria de los centros públicos de Infantil y Primaria.
Aunque una investigación de EsadeEcPol publicada en 2022 indicó que no hay una "evidencia rigurosa" acerca del efecto de la modalidad de la jornada sobre el rendimiento académico, los autores consideran que "se ha instalado en el seno del profesorado una narrativa en favor de la jornada matinal y sus beneficios sobre el alumnado".
Según publica EL ESPAÑOL, el sociólogo educativo y profesor de Sociología de la Educación en la Universidad de Valencia (UV), Daniel Gabaldón, lleva ocho años haciendo un estudio, "con los pocos datos que hay", del que ha extraído una conclusión: se han hallado más beneficios en la jornada partida que en la continua.
Uno de los motivos es el descanso. El análisis elaborado a partir de la encuesta de usos de tiempo del Instituto Nacional de Estadística (INE) demostró que el alumnado con jornada continua dormía unos 42 minutos menos cada día. Asimismo, otros de sus trabajos apuntan a que los alumnos con jornada continua están más cansados, tienen una peor alimentación y cuentan con un mayor número de deberes, lo que "no se traduce en un mejor rendimiento".
En el lado opuesto, uno de los beneficios que el sociólogo ha encontrado en la jornada continua es que estos alumnos hacen más deporte, con una media de 16 minutos más al día que el alumnado que asiste a centros con jornada partida.
Tal y como señala Gabaldón, la narrativa de que la jornada continua es mejor ha calado entre las familias, pues confían en que las decisiones del profesorado vayan a favor del alumnado. Sin embargo, para él, los docentes no deberían participar en estos debates porque son "juez y parte".