7-3 | Cómoda victoria para el Puertollano en el derbi frente al Manzanares
El FSD Puertollano se impuso con total solvencia en su pista al Manzanares en el primer derbi regional de la temporada en la Segunda División de fútbol sala. El cuadro minero no tuvo problemas para encarrilar una contienda que dejó sentenciada en la primera mitad y que remató en la segunda, para un marcador de 7-3 final.
El partido comenzó a caer muy pronto en las redes de los locales, que se adelantaron a los 27 segundos tras rematar Dani Colorado a la red un córner de Orellana. Trataron de responder los visitantes con varias ocasiones claras para Otero, Pepe y Kiki II, pero lo que acabaron encontrándose fue el segundo del Puertollano. De nuevo otro saque de esquina castigó al Manzanares, al desviar la pelota a la red Chino en propia puerta para el 2-0. Pudo ampliar su renta el Puertollano en estos minutos, pero el meta visitante se encargó de desbaratar el peligro.
Con el 2-0, fue cayendo los consabidos contragolpes y uno de ellos sirvió para elevar el tercero a la cuenta de los industriales, obra de Dani Colorado. El cuarto, que prácticamente sentenciaba el envite, cayó al borde del descanso, al dejar sentado Anuar al portero del Manzanares y batirlo con una sutil vaselina.
El Manzanares no se rindió
En la segunda mitad, el Puertollano tenía el choque prácticamente resuelto ante un Manzanares que, no obstante, nunca se rindió. Sin embargo, se encontraron muy pronto con otro jarro de agua fría, al anotar Nano el quinto con un fuerte disparo. Los visitantes, ante este escenario, emplearon muy pronto el recurso del portero-jugador.
A pesar de que los visitantes se toparon con otro contratiempo al cometer mediada la segunda parte la quinta falta, los manzanareños demostraron orgullo al ir a por el choque. Así, recortaron distancias con el 5-1, en un saque de esquina que Nano se metió en su propia portería. Más tarde, Dani Juárez culminó una excelente jugada de cinco. Chino, en otro córner, logró elevar el 5-3 que mantenía las espadas en todo lo alto.
Pero con los visitantes volcados, el Puertollano sentenció. Dos goles de Nano y Manu Orellana, ambos desde su propio terreno de juego, abortaron la remontada de un Manzanares al que nunca le faltó corazón en el primer derbi de la temporada.