El Albacete ha comenzado cuenta atrás en su lucha para el ascenso directo, cuando le quedan nueve jornadas para la conclusión de la temporada regular en Primera división RFEF.
Sabadell, el domingo (17:00 horas), será la primera estación donde pasará el tren albaceteño que busca aumentar su distancia con sus perseguidores, puesto que a pesar de ser líder del Grupo 2, solo tiene una renta de dos puntos respecto al segundo clasificado, el Andorra.
A cuatro se encuentra el tercero, el filial del Villarreal, y a once puntos el cuarto y quinto de la tabla, Atlético Baleares y San Fernando, los otros conjuntos que ocupan posición de play-off de ascenso a Segunda división.
Solo el primero subirá directamente de categoría, mientras que del segundo al quinto de cada grupo se enfrentarán en dos semifinales (a partido único) y una final (también a un partido) para dilucidar quién es el otro conjunto que asciende a la Liga de Fútbol Profesional.
Este próximo fin de semana tendrá enfrente a un Sabadell que se ha situado, tras su última victoria, a cinco puntos de los puestos que permiten disputar las rondas de ascenso, aunque solamente cuenta la misma distancia de puntos con los puestos de descenso, lo que supone una muestra de la igualdad y competitividad que existe en este grupo de la categoría de bronce del fútbol español.
El cuadro catalán ha perdido esta temporada seis encuentros en su estadio, circunstancia que espera aprovechar un Albacete que no pierde como visitante desde el 13 de noviembre, cuando cayó 4-1 frente a la Balompédica Linense.
Desde entonces, el equipo de Rubén De la Barrera ha disputado ocho partidos fuera de casa, sumando seis empates y logrando solamente dos triunfos lejos del Carlos Belmonte.