Castilla-La Mancha debe aumentar su competitividad y mejorar su promoción turística
Castilla-La Mancha debe trabajar para aumentar la competitividad de sus recursos patrimoniales y debe analizar si la promoción turística que está realizando de ellos tiene resultados o no, a fin de mejorar la gestión, la calidad y el producto final, según el Termómetro Económico de Castilla-La Mancha del tercer trimestre del año, que se ha dedicado de forma especial al turismo, tanto patrimonial, como idiomático. Este termómetro se elabora entre la Universidad de Castilla-La Mancha y la Fundación Caja Rural CLM.
Son apreciaciones que se recogen en este Termómetro Económico de Castilla-La Mancha del tercer trimestre de 2017, y que han presentado este vicerrectora de Internacionalización y Formación Permanente de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM), Fátima Guadamillas, el gerente de la Fundación Caja Rural Castilla-La Mancha, Vicente Muñoz, y el director del Termómetro Económico, Mario Javier Donate, junto al profesor tiular de la Universidad regional Luis Alfonso Escudero.
En la rueda de prensa de presentación de los datos, el profesor Escudero ha incidido en que Castilla-La Mancha "tiene grandes recursos que están distribuidos geográficamente por todo el territorio" y aunque cuenta con dos ciudades Patrimonio de la Humanidad, ya consolidadas y otros lugares calificados como Bien de Interés Cultural (BIC), además de castillos, conventos, monasterios, iglesias, molinos de viento o arquitectura popular, hay recursos que no cuentan con la afluencia turística esperada.
De ahí la importancia de analizar la promoción que se está haciendo y ver "cuál tiene resultados y cuál no" a fin de aumentar el número de visitantes, ha indicado Escudero, que ha propuesto recuperar la Ruta de Don Quijote y promocionar los yacimientos de arte rupestre de la región.
Tras recordar que 2018 es el Año Europeo del Patrimonio, el profesor de la UCLM ha indicado que Castilla-La Mancha en el ámbito turístico es "una región incipiente" y aunque trabaja en la promoción de sus recursos, el problema es que otras regiones como Castilla y León, Extremadura, Andalucía o Madrid, tienen también esos recursos, por lo que se hace necesario "aumentar la competitividad".
Además, el Termómetro Económico -que la institución académica realiza en colaboración con la Fundación Caja Rural- ha abordado el turismo idiomático, como ha detallado la vicerrectora de Internacionalización de la UCLM, Fátima Guadamillas, quien ha defendido la necesidad de "competir" en este sector, aumentando la calidad y teniendo en cuenta el tirón de que esta sea "la tierra del Quijote' y de que el país recibe a "gran cantidad de personas" que buscan aprender español.
El director de la Fundación Caja Rural, Vicente Muñoz, ha apostado por fijarse como "gran objetivo" el aumento de las visitas y las pernoctaciones, teniendo en cuenta que la tendencia está "más o menos" igual durante el tercer trimestre, en el que, por el contrario, lo que "ha subido mucho" ha sido el uso de la hostelería, cerrándose un "verano bastante feliz" en el que tanto visitantes como autóctonos "hemos salido más a los bares, las terrazas y a comer fuera".
Situación económica
Por otro lado, Castilla-La Mancha mantuvo un crecimiento firme y sostenido en el tercer trimestre de 2017, que se reflejó en un incremento del Producto Interior Bruto (PIB) interanual del 2,3 % con respecto al mismo periodo del año anterior y que la tasa de paro bajara del 20 % hasta situarse en el 18,6%, tal como recogen los datos del Termómetro.
Muñoz ha destacado que los datos del tercer trimestre del año indican que Castilla-La Mancha está creciendo de manera firme y sostenida y además convergiendo con España.
Así, mientras en el segundo trimestre de 2017 Castilla-La Mancha el PIB creció un 1,9 % en tasa interanual frente al 3,1 de España, en el tercer trimestre el crecimiento de la tasa interanual del PIB subió hasta el 2,3 en la comunidad autónoma, mientras que el de España se mantuvo en el 3,1 %.
"Por lo tanto estamos convergiendo, lo cual es una noticia francamente buena", ha afirmado Muñoz, que ha subrayado que la otra "gran noticia" del trimestre pasado es que Castilla-La Mancha ha roto la barrera del 20 % de paro.
El segundo trimestre se cerró con un 22,4 % de paro en la región y el pasado la tasa descendió 18,6 %, que aunque sigue una cifra alta ha experimentado una mejora "extraordinaria", ha afirmado.
Recuperación regional
Datos en los que ha ahondado el director del Termómetro Económico de Castilla-La Mancha, Mario Javier Donate, que ha manifestado que la región continúa "en la senda de la recuperación" y crecimiento, aunque ese crecimiento es "menor del que se da a nivel nacional en términos interanuales", ya que se sitúa en el 2,3%, una cifra "aceptable" pero que aún sitúa a la región "en el furgón de cola".
No obstante, ha apreciado que la Comunidad Autónoma "tiene más potencial para crecer", vía exportaciones o mediante la mejora de la demanda interna, siempre y cuando se potencien sectores estratégicos como las exportaciones, que son "un motor muy importante del crecimiento regional" y que durante este trimestre han tenido una "evolución positiva".
Ha destacado que la actividad industrial se mantiene como en 2016 pero evoluciona "a un ritmo menor en algunos sectores" y que se crean "menos empresas que en el tercer trimestre de 2016", aunque ha resaltado que el índice de confianza empresarial, que mide la opinión de los empresarios sobre el trimestre acabado, "señala un incremento del 2,08% comparado con el segundo trimestre".
Asimismo, ha reseñado el incremento interanual de las actividades hosteleras, las tasas positivas interanuales del índice de ventas del comercio minorista, el crecimiento de las matriculaciones de los turismos y de las exportaciones e importaciones, así como la "disminución muy importante" del déficit, que en septiembre se situó en el 0,25% del PIB, aunque la deuda ha crecido un 0,4% más, hasta los 14.323 millones de euros.
Finalmente, Donate ha explicado que la tasa de paro ha bajado al 18,6%, lo que supone que haya 38.300 personas menos paradas en la región respecto al segundo trimestre del año, y que el coste total por trabajador y mes ha sido de 2.243,84 euros frente a los 2.454,27 de España.