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Economía COMPLETO INFORME LABORAL DE ADECCO CON MOTIVO DEL DÍA DE LA MUJER

Así trabajan las mujeres: radiografía del empleo femenino en Castilla-La Mancha

6 marzo, 2018 00:00

El próximo jueves 8 de marzo se celebra el Día Internacional de la Mujer y desde The Adecco Group, como empresa líder en recursos humanos y referente del mercado laboral, han querido analizar cuál es el perfil de la mujer trabajadora y de la desempleada en Castilla-La Mancha, para presentar la radiografía más completa del empleo en clave femenina. En esta nueva entrega, que se elabora en base a los datos de la Encuesta de Población Activa, Adecco –en colaboración con Barceló & Asociados- ha detallado cuál es el papel de la mujer castellano-manchega dentro del mercado de trabajo y cuál ha sido su evolución en el último año.

Así, para aquellas que ahora mismo están trabajando, se corresponde con el perfil de una asalariada de entre 35 y 44 años, con estudios superiores y que trabaja en el sector servicios (área de servicios y ventas). En cambio, el perfil de aquellas que están desempleadas se corresponde con el de una mujer de entre 45 y 54 años de edad (aunque son las jóvenes de entre 16 y 19 años quienes ostentan la tasa de paro más elevada), y que contrasta con la edad de la mujer desempleada española (35 a 44 años), que tiene formación hasta la primera etapa de la educación secundaria y que lleva más de dos años buscando empleo sin encontrarlo.

Análisis por edad

En Castilla-La Mancha trabajan actualmente 317.900 mujeres. Si analizamos el perfil de la mujer trabajadora por edad, vemos que el grupo más numeroso de mujeres ocupadas en la región corresponde a aquellas de entre 35 y 44 años de edad, quienes suman 96.600 personas, el 30,4% del total.

Le sigue el de mujeres de entre 45 y 54 años, con 84.400 ocupadas, que equivale al 26,5% del total. Si a estos dos grupos sumamos el de mujeres ocupadas de entre 25 y 34 años de edad (que suman 72.300 personas, que supone el 22,7% de las mujeres ocupadas en toda la autonomía), tenemos que el 79,7% de las mujeres que trabajan en Castilla-La Mancha tiene entre 25 y 54 años.

Por lo tanto, los grupos de edad por encima y por debajo de dicha franja tienen un papel secundario, en particular en el caso de las más jóvenes. En efecto, las mujeres de menos de 25 años solo ocupan el 4,9% de los puestos de trabajo en Castilla-La Mancha, con un total de 15.600 ocupadas. Más importante resulta el rol del grupo de mujeres de 55 y más años de edad, que tiene en sus manos el 15,4% restante de puestos de trabajo, que equivale a 49.000 empleos.

Esta distribución de los puestos de trabajo femeninos entre los distintos grupos de edad es similar a la del conjunto nacional, con el matiz de que en Castilla-La Mancha tiene un peso mayor en el empleo el grupo de edad de entre 25 y 34 años, cosa que se compensa con una menor participación de todas las demás franjas de edad.

Castilla-La Mancha tiene la segunda mayor participación de la franja de edad de 25 a 34 años, solo por detrás de Andalucía (22,9%) y con la media nacional en un 20,9%. Al mismo tiempo, es la comunidad que exhibe la tercera menor participación en el empleo de mujeres de 35 a 44 años, con un 30,4%, que se compara con una media nacional de un 31%. La práctica totalidad de los empleos femeninos creados en Castilla-La Mancha el pasado año han sido para mujeres de 45 o más años de edad: 5.600 para las de 45 a 54 años (+7,1%) y 5.800 para las de 55 y más años (+13,5%).

Sin embargo, proporcionalmente, el mayor incremento en el empleo se ha dado entre las mujeres de 16 a 19 años, franja que ha aumentado la contratación un 42,2%, aunque se trate solo de 500 empleos. La única franja de edad que pierde puestos de trabajo en la comunidad castellano-manchega es la de mujeres de 25 a 34 años de edad, que cede 1.400 puestos (-1,9%). Entremedias, las mujeres de entre 20 y 24 años han incrementado su empleo en 600 puestos (+4,7%) mientras que las de 35 a 44 lo han hecho en 100 (+0,1%).

La mujer trabajadora según su formación

El colectivo de mujeres ocupadas puede clasificarse en cuatro categorías, según sea el máximo nivel formativo alcanzado: i) hasta escuela primaria; ii) primera etapa de la educación secundaria; iii) segunda etapa de educación secundaria y/o FP, y iv) formación universitaria y superior.

De las 317.900 mujeres que trabajan en Castilla-La Mancha, el grupo más nutrido, con 130.800 personas (41,2% del total), es el de aquellas que alcanzaron la Universidad. Le sigue en importancia el grupo de mujeres con la primera etapa de la secundaria, que reúne a 90.500 personas (28,5%) y las que tienen la segunda etapa y/o FP (79.900 mujeres; 25,1%). Las restantes 16.700 ocupadas castellano-manchegas completaron como máximo la escuela primaria (5,2%).

Si se compara la composición del empleo femenino castellano-manchego según el nivel formativo con la de todo el país, la diferencia principal es el menor espacio que ocupan las mujeres con educación superior, que alcanza al 48% en toda España. Esto se compensa con una mayor presencia del resto de grupos formativos, en especial el de la primera etapa de la secundaria.

Análisis por situación profesional

Un 85,6% de las mujeres que trabaja en Castilla-La Mancha es asalariada. Este grupo está formado por 271.900 personas. Por otra parte, hay 42.300 mujeres, un 13,3% de las mujeres ocupadas en la autonomía, que son emprendedoras. Además, hay un pequeño grupo de 3.600 mujeres (1,1% del total), que no son ni lo uno ni lo otro (miembros de cooperativas, ayuda en el negocio familiar, tareas voluntarias, etc.).

Entre las asalariadas, el colectivo más numeroso es el de las que trabajan en el sector privado, con 190.000 mujeres. Eso equivale al 59,8% del total de mujeres con empleo en la región. Es la segunda proporción más reducida entre todas las comunidades autónomas. El 25,8% que completa el grupo de mujeres que trabaja en relación de dependencia corresponde a asalariadas del sector público, que suman 81.900 personas (la segunda proporción más alta del país). Por su parte, las emprendedoras pueden desagregarse en dos grupos: empleadoras y autónomas (sin empleados). El más nutrido de los dos es el último, con 32.600 mujeres (10,3% de todo el empleo femenino castellano-manchego). Las mujeres con empleados a cargo suman 9.700, un 3,1% del total.

En comparación con el conjunto de España, Castilla-La Mancha destaca por dos cosas. Por un lado, el mayor peso del empleo público, que es 6,2 puntos porcentuales mayor (19,6% en el conjunto de España). Y por otro, la menor importancia relativa de las asalariadas del sector privado, que es 8,3 p.p. inferior (68,1% en toda España).

Los datos anteriores nos permiten deducir que en la autonomía manchega, por cada 10 mujeres asalariadas en el sector público, hay 23 en el sector privado. En España, esa relación es de 10 a 35 mientras que en las autonomías oscila desde las 45 mujeres en Baleares y en la Comunidad Valenciana, hasta las 16 de Extremadura (la única con una relación menor que Castilla-La Mancha). Además, en la autonomía castellano-manchega se cuentan 34 mujeres autónomas por cada 10 emprendedoras con asalariados a cargo, que es la máxima relación del conjunto autonómico. La media española es de 24 a 10.

Empleo femenino y sector de actividad

Una abrumadora mayoría de mujeres castellano-manchegas trabaja en el sector de los Servicios. En efecto, suman 274.400 mujeres, un número que equivale al 86,3% de todas las ocupadas. Por otra parte, hay 28.500 mujeres que desempeñan su actividad en la Industria (9% del empleo femenino), 11.100 que lo hacen en la Agricultura[2] (3,5%) y apenas 4.000 que trabajan en la Construcción (1,2%).

En comparación con la media nacional, la distribución sectorial del empleo femenino castellano-manchego tiene un peso menor en los Servicios, que se compensa con una mayor importancia relativa de los otros tres sectores, en especial el industrial y el agrícola. Castilla-La Mancha, junto a Aragón, la Comunidad Valenciana y Navarra, son las únicas autonomías que han creado puestos de trabajo en los cuatro sectores productivos. En el caso de nuestra región, la mitad de los nuevos puestos se ha originado en los Servicios, con 5.900 contrataciones (+2,2%).

Sin embargo, en términos porcentuales son más importantes los nuevos empleos en la Agricultura (+50,3%; 3.700 nuevos empleos) y en la Construcción (+41,1%; 1.200 contrataciones). Por su parte, la Industria ha sumado 500 posiciones femeninas, un crecimiento del 1,7%.

La mujer trabajadora castellano-manchega según su ocupación

La Organización Mundial del Trabajo clasifica todas las ocupaciones en diez grandes categorías[1]. De ellas, la más significativa en el empleo femenino castellano-manchego es, con amplia diferencia, la de Trabajadores de Servicios y Ventas, con un 31,8% del total (incluye, entre otras, a camareras, peluqueras y dependientes, pero también a azafatas, bomberos y policías). Son 101.200 mujeres las que trabajan en esta categoría en la autonomía.

Las ocupaciones Técnicas y Profesionales científicas e intelectuales (en esta categoría se incluyen, por ejemplo, a ingenieras, médicas, odontólogas, abogadas, economistas, profesoras, etc.) conforman el segundo grupo con más mujeres en la región, con un total de 63.100 personas (19,8% del total).

La siguiente categoría en importancia, con 58.700 personas, es la de mujeres con Tareas elementales (donde se agrupan, entre otras, a empleadas domésticas, limpiadoras, vigilantes, etc.), que aglutina el 18,5% de todo el empleo femenino castellano-manchego. Es decir que 7 de cada 10 mujeres que trabajan en la comunidad manchega (el 70,2%) lo hacen en una de las tres categorías ocupacionales mencionadas anteriormente.

Cuando se coteja la distribución del empleo femenino de Castilla-La Mancha según categorías ocupacionales con la de España en su conjunto, se observa una mayor importancia de las tareas elementales y de Servicios y ventas, que se compensa con un menor espacio para los empleos de oficina y las ocupaciones técnicas y profesionales científicas e intelectuales, y en menor medida, de las técnicas y profesionales de apoyo (entre estas últimas sobresalen las agentes de seguros, logopedas, higienistas, agentes de viajes, pilotos aéreos, etc.).

En Castilla-La Mancha, cada 10 mujeres con empleos elementales se cuentan 15 con ocupaciones Técnicas y profesionales, tanto científicas e intelectuales como de apoyo. De media, en España, esa relación es de 10 a 18. 

Tres de cada diez nuevos empleos femeninos en Castilla-La Mancha han sido de Servicios y ventas, con 3.300 contrataciones (+3,3%). Le siguen, con 3.200 nuevas plazas, las tareas elementales (+5,8%) y, con 2.800 empleos, las tareas de oficina (incluye tareas administrativas, pero también bibliotecarias, encuestadoras, recepcionistas, telefonistas y cajeras, entre otras), que ha crecido un 7,1% interanual.

Hay tres categorías donde se han perdido puestos de trabajo. El peor resultado ha ocurrido en los empleos cualificados de las manufacturas y la construcción (donde se incluyen, entre otros, a electricistas, albañiles, mineras, chapistas, herreras, etc.), donde se han suprimido 1.100 empleos femeninos (-12,2%).  

Principales datos del informe

·     Efectivamente se han creado 5.600 plazas para las mujeres de 45 a 54 años (+7,1%) y 5.800 para las de 55 y más años (+13,5%). Sin embargo, proporcionalmente, el mayor incremento en el empleo se ha dado entre las mujeres de 16 a 19 años, franja que ha aumentado la contratación un 42,2%, aunque se trate solo de 500 nuevos empleos en Castilla-La Mancha.

·     La única franja de edad que pierde puestos de trabajo en la comunidad castellano-manchega es la de mujeres de 25 a 34 años de edad, que cede 1.400 puestos (-1,9%). Entremedias, las mujeres de entre 20 y 24 años han incrementado su empleo en 600 puestos (+4,7%) mientras que las de 35 a 44 lo han hecho en 100 (+0,1%).

·     En el último año, el empleo femenino en Castilla-La Mancha ha crecido un 3,7%, generándose 11.300 nuevos empleos que han ocupado mujeres (es la cuarta comunidad más crece el empleo femenino). En la región, las mujeres más beneficiadas con estos nuevos empleos son las que tienen la primera etapa de la educación secundaria quienes han captado 9.400 de ellos (11,6%, el segundo mayor incremento autonómico). Pero también tiene el segundo mayor incremento en el empleo de mujeres con formación superior (+4,1%, 5.100 plazas).

·     Dos de cada tres empleos femeninos creados en 2017 en la región han sido asalariados (+2,8%) tanto del sector público (+3,4%) como del privado (+2,6%). Pero también ha crecido el empleo para las emprendedoras (+9,2%), aunque no con la misma suerte pues las empleadoras con personal a cargo han perdido peso (-4,9%) mientras las autónomas han crecido con fuerza (+14,2%, el segundo mayor incremento autonómico).

·     Tres de cada diez nuevos empleos femeninos creados en Castilla-La Mancha pertenecen a Servicios y ventas, con 3.300 contrataciones (+3,3%). Le siguen, con 3.200 nuevas plazas, las tareas elementales (+5,8%) y, con 2.800 empleos, las tareas de oficina, que han crecido un 7,1% interanual.

·     En cuanto a las mujeres sin empleo, el número de paradas ha disminuido en todos los grupos de edad. La reducción total en Castilla-La Mancha ha sido de 9.000 mujeres, que equivale a un recorte de un 7,4% en el desempleo. Las mujeres de 55 y más años son las que disfrutan de la mayor caída en la cantidad de paradas: -22%. En cambio, las paradas de 45 a 54 años han tenido el descenso más moderado: -2,6%.

·     El número de paradas castellano-manchegas se ha reducido en los cuatro niveles de formación, aunque de una forma proporcionalmente distinta: un 13,4% en el caso de las mujeres con hasta educación primaria (la mayor caída) y solo un 1,5% en el de las mujeres con educación superior (el descenso más moderado).