Europa se plantea eliminar las monedas de 1 y 2 céntimos de euro
La Comisión Europea ha anunciado que evaluará el uso de las monedas de uno y dos céntimos de euro de cara a su posible eliminación y a la introducción de una normativa que armonice el redondeo de precios en todo el bloque.
Así consta en el programa de trabajo para este año que el Ejecutivo comunitario ha presentado este miércoles y que se compone por un centenar de iniciativas agrupadas en torno a las seis prioridades políticas fijadas por el equipo de la conservadora alemana Ursula von der Leyen.
El vicepresidente de la Comisión responsable de Relaciones Institucionales, Maros Sefcovic, ha explicado en una rueda de prensa que el objetivo de la evaluación es analizar la "eficiencia" en el uso de estas monedas y sopesar si es necesario adoptar normas comunes.
En concreto, Bruselas quiere evitar que cada Estado miembro siga un procedimiento distinto de redondeo. Según ha explicado, algunos socios comunitarios como Finlandia, Italia, Bélgica, Irlanda o Países Bajos ya tienen normas para redondear las facturas de compras en tiendas, mientras que otros no tienen regulación concreta.
"Queremos asegurar que hacemos el análisis adecuado y después consideraremos nuestra propuesta", ha apuntado el eslovaco, para después puntualizar que en este proceso se consultará a un amplio abanico de actores implicados, incluidos los Estados miembros.
Esta iniciativa se enmarca dentro del programa de trabajo que guiará las actuaciones del primer año completo de la Comisión Europea liderada por Von der Leyen. En total, el programa contiene un centenar de iniciativas agrupadas en las seis prioridades políticas del nuevo Ejecutivo comunitario.
Dentro del apartado económico, la Comisión Europea destacan el prometido seguro europeo de desempleo (cuyo lanzamiento tendrá que esperar a finales de año), un refuerzo de la Garantía Juvenil, un plan de acción contra el blanqueo de capitales o una revisión de la normativa sobre requisitos de capital.
Muchas de las medidas que Bruselas pretende desarrollar a lo largo de este año están relacionadas con el llamado Pacto Verde Europeo y en este contexto se inscriben también el Fondo de Transición Justa, el plan de inversiones 'verdes' o la estrategia 'De la Granja al plato'.
Además, el programa de trabajo incluye otras medidas como una propuesta legislativa para impulsar cargadores comunes para todos los dispositivos móviles, una nueva estrategia de seguridad, una estrategia industrial, una comunicación sobre inteligencia artificial, una iniciativa para reformar la OMC y dar pasos hacia una perspectiva europea "creíble" de los Balcanes Occidentales.