Tras la publicación de las nuevas medidas de lucha contra el coronavirus en Castilla-La Mancha, la Federación Regional de Automoción ha solicitado que se exceptúe al sector de los concesionarios de la prohibición de apertura fijada para los establecimientos comerciales de más de 300 metros, ya que los establecimientos del sector cuentan en su mayoría con superficies mayores al límite, por lo que no les resultará posible abrir mientras estas medidas estén en vigor.

Desde la Federación Regional de Asociaciones de Empresarios de Automoción de Castilla-La Mancha han recordado en nota de prensa las especiales características de estos establecimientos, donde por el tipo de servicio que ofrecen no presenta, alegan, situaciones de peligro debido a posibles aglomeraciones, pudiendo además implantarse medidas adicionales de control como sistemas de cita previa, lo que garantiza perfectamente unas condiciones de seguridad y de garantía de todas las medidas higiénico sanitarias hacia sus clientes en la adquisición de sus vehículos.

Por otro lado, señalan que el vehículo puede ser en muchas ocasiones un elemento indispensable dentro del ámbito doméstico o la herramienta de trabajo para un profesional, por lo cual este sector podría ser considerado incluso como actividad esencial.

Por último, la Federación Regional apunta que esta medida puede suponer un gran perjuicio para el sector de los concesionarios en la región, ya de por sí muy mermado por una caída de las ventas de prácticamente un 70 por ciento en los últimos meses.