Asaja prepara una contundente batalla contra el parón de las macrogranjas en Castilla-La Mancha
"No tenemos miedo a las amenazas", afirman desde la organización agraria regional, "aunque les joda a los ecologistas".
21 diciembre, 2021 12:54La formación agraria Asaja de Castilla-La Mancha se ha mostrado muy beligerante contra las plataformas que se oponen a las instalaciones de macrogranjas en pueblos de la comunidad autónoma y ante el Gobierno autonómico tras la aprobación de la moratoria para que estas instalaciones no puedan tramitarse, y ha avisado de que plantearán una batalla que empezarán a diseñar con el sector este mismo miércoles en una reunión en Cuenca.
Sobre la problemática de la instalación de estas macrogranjas y la moratoria, Fernando Villena y José María Fresneda han lamentado que este planteamiento se debe a la reacción ante las manifestaciones en las localidades.
En la rueda de prensa anual para hacer balance de la situación del campo castellanomanchego, han indicado que en pueblos de 20 habitantes con macrogranjas proyectadas se viven manifestaciones de 500 personas que van a "acojonar" a los gobiernos.
En este punto, Fresneda ha avisado de que las formaciones agrarias "también saben hacer iniciativas populares" y, por ejemplo, convocar referéndums para que los pueblos decidan si quieren permanecer en zonas de especial protección.
Estrategia
De la reunión ahora planteada en la capital conquense, "saldrá una estrategia en materia de pedagogía a la gente y de formación", además de un calendario de actuaciones ante el Gobierno".
"Esto o se arregla del todo o no se arregla. Los que están alimentando este caos porque también están alimentados son esas plataformas de pueblos vivos que quieren hacer pueblos muertos", ha lamentado Fresneda, quien ha cargado contra los movimientos populares que se enfrentan a la instalación de macrogranjas, asegurando que en las manifestaciones se ha visto a gente que "son los mismos que protestaban por una sanidad gratuita". "Son los mismos, pero me da igual".
Ahora, Asaja quiere salir "poco a poco" de esta situación, abandonando "las garras del movimiento conservacionista apoyado por partidos políticos".
Se trata, ha asegurado, de "defender el sistema productivo", ya que "por interés político, una persona al frente de un Ayuntamiento no puede paralizar un proyecto". "No tenemos miedo a las amenazas".
Ha defendido además que los impulsores de estas macrogranjas "son granjeros, aunque les joda a los ecologistas". "Son granjeros que viven en el pueblo, con mujer e hijos, y que no vienen de la capital".
Para preparar esta ofensiva, la reunión de este miércoles ha citado a empresarios del sector de piensos, a ganaderos y a la asociación de productores de porcino. "Con toda la gente del sector menos con aquellos que dicen que las macrogranjas huelen mal, que son gente que no vive en el pueblo y que viene diez días en verano", ha rematado.