La Conferencia Sectorial de Agricultura y Desarrollo Rural, presidida por el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, ha acordado este martes la distribución de 289,76 millones de euros entre las comunidades autónomas para la ejecución de programas agrícolas, ganaderos, alimentarios y de desarrollo rural. De ellos, Castilla-La Mancha recibirá 35 millones para la reestructuración y reconversión del viñedo y 3,2 millones para 121 propuestas de promoción de vinos a terceros países por parte de 83 bodegas y cooperativas vitivinícolas de la región. A ellos, habría que sumar 12,7 millones correspondientes al desarrollo rural, por lo que la cantidad total adjudicada en esta conferencia ascendería a los 51,2 millones de euros.

Por sectores y a nivel global, de esta cantidad, se destinan 73,7 millones de euros a líneas de actuación de la industria alimentaria; 104,4 millones de euros a desarrollo rural; más de 17 millones de euros para sanidad animal y vegetal, y 94,5 millones de euros para programas agrícolas y ganaderos.

 Valoración de Castilla-La Mancha

Por su parte, el consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, que ha asistido a esta reunión, ha explicado que la región va a recibir un total de 35,3 millones de euros procedentes del reparto de fondos nacionales para la reestructuración y reconversión del viñedo, el 48 por ciento de los recursos que se reparten entres las comunidades en el país, según ha informado la Junta.

Además, entre los asuntos abordados se ha determinado, dentro del programa de apoyo al sector vitivinícola, la asignación para Castilla-La Mancha de 3,2 millones de euros del Fondo Europeo Agrícola de Garantía (FEAGA) para la promoción de vinos a terceros países fuera de la Unión Europea. Esta cuantía servirá para la promoción de un total de 121 propuestas presentadas por 83 bodegas y cooperativas vitivinícolas de la región.

Al respecto, ha expresado que es "una línea muy importante" que permite que los productos castellano-manchegos "lleguen a cualquier rincón del mundo", algo muy relevante dado que "muchos de esos productos que se exportan están amparados bajo las denominaciones de origen y es producto embotellado".

Apoyo escaso al desarrollo rural

Además, en la conferencia sectorial se ha analizado la territorialización de los 12,7 millones de euros del Programa de Desarrollo Rural (PDR) que corresponden a Castilla-La Mancha para este año 2018. "Es una cantidad pequeña, debería ser mayor", ha dicho el consejero, quien ha recordado que en esta legislatura se ha venido "denunciando" desde Castilla-La Mancha "en varias ocasiones" que el PDR de la región "cuenta con una aportación de la Administración General del Estado de 226 millones de euros menos que el que teníamos en el periodo anterior".

Renegociación de la PAC

Sobre la negociación de la PAC para el periodo 2021-2027, el consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural de Castilla-La Mancha ha agradecido al actual ministro del área, Luis Planas, que "acerque el debate a este foro, ya que la posición en materia de agricultura y ganadería se debe tomar juntos el Ministerio y las Comunidades Autónomas", algo, que, ha destacado, dista respecto "a lo que sucedía antes", recordando que desde la región se lleva "tres años insistiendo" en que "este debate debía haberse realizado antes".

Sobre el documento que desde el Ministerio se ha planteado a las comunidades, ha indicado que se debe "trabajar más" en el mismo y "tenerlo abierto para ir incluyendo cuestiones concretas". Así, ha incidido en que hay unos reglamentos de la Comisión Europea encima de la mesa "y hay que decir qué nos gusta, qué no nos gusta y qué cosas tenemos que incluir en ese documento y que no están".

De esta manera, durante su intervención en el Consejo, Martínez Arroyo ha puesto sobre la mesa una serie de cuestiones relativas a los mercados que cree deberían quedar recogidos en el documento. En concreto, ha explicado, se trata de que se incluya en el reglamento de la PAC "la posibilidad de que el sector se autorregule y que haya mecanismos de mercado que respondan a la volatilidad de precios que sufren los agricultores y ganaderos" y exista "una cierta garantía".