La plantilla de Lactalis-Nestlé está convocada a cuatro jornadas de huelgas parciales de cuatro horas en cada turno, los próximos días 21 y 23 de noviembre y 12 y 14 de diciembre, tras concluir sin acuerdo el acto de mediación previo celebrado esta mañana ante el jurado arbitral de Guadalajara.

El comité de empresa ha formalizado ya la convocatoria de los paros, que empezarán a las 22.50 horas del próximo lunes, día 20, en la entrada del turno de noche, según ha informado el Comité de empresa en un comunicado.

Tras fracasar la mediación, la empresa ha abierto 'in extremis' una posibilidad de reconducir el conflicto al anunciar que quiere aprovechar, el próximo viernes, la reunión prevista para hablar del calendario laboral de 2018 para retomar la negociación del convenio colectivo.

"Nosotros no nos hemos negado al diálogo en ningún momento y, de hecho, llevamos hablando desde enero, pese a que en once meses no hemos avanzado ni un centímetro por la actitud dilatoria de la empresa, que jamás ha querido abordar las cuestiones centrales del convenio", ha señalado el responsable de la sección sindical de CCOO en Lactalis-Nesté, Ángel Fernández.

Y, entre dichos asuntos principales, ha citado medidas para la unificación de las tablas (hay hasta tres escalas salariales en el seno de una plantilla de 600 personas), subidas salariales, pluses, licencias o permisos retribuidos.

Dicho esto, el sindicalista ha señalado que volverán a la reunión del viernes "dispuestos a escuchar cualquier oferta de la empresa", aunque ha puntualizado que, "después de doce reuniones infructuosas, 13, con la de hoy en mediación, no tenemos razones para el optimismo, pero ojalá nos sorprenda con alguna propuesta que sirva para reconducir la situación y evitar el conflicto".

En opinión de Fernández, "sería muy de valorar que la empresa se presente el viernes con otra actitud y con algún planteamiento responsable y serio, pero entretanto lo que nos toca al comité y a las secciones sindicales es organizar los paros y preparar a la plantilla para cerrar filas en la defensa unánime del convenio".

"Todos los compañeros sabemos lo que hay en juego y se lo tenemos que dejar muy clarito a la empresa, ya está bien de darnos largas y tomarnos el pelo", ha concluido el representante de CCOO.