Paralizada la instalación de dos macrogranjas porcinas para 10.000 cerdos en Toledo
El Ayuntamiento de Retamoso de la Jara (Toledo) ha paralizado la instalación de dos macrogranjas porcinas para la cría de casi 10.000 cerdos entre ambas, ya que sendos proyectos han generado un gran rechazo entre los vecinos de la localidad, así como del cercano municipio de Torrecilla de la Jara.
Según han informado a EFE el teniente de alcalde de esta última población, Delio Guisande, el Consistorio retamosano ha aprobado un decreto que anula la licencia de construcción concedida en su momento a los promotores de una de las granjas, que tenía previsto albergar 7.200 animales.
Guisande también ha comentado que al promotor de la otra explotación, ideada para unos 2.000 cerdos, se le ha enviado un burofax comunicándole igualmente la revocación de su permiso de edificación.
Respecto a este último, ha dicho que todavía no han recibido contestación de él, pero tienen "muy claro que se va a paralizar la puesta en marcha de su granja”, ha apuntado el responsable municipal torrecillano.
Precisamente, esta explotación con 2.000 animales estaría dentro del término municipal de Retamoso, pero a poco menos de 2 kilómetros de un núcleo de viviendas que sí pertenecen a terrenos de Torrecilla.
La decisión puede ser recurrida
Delio Guisande ha señalado que la anulación de las licencias puede ser recurrida, por lo que ha advertido que el proceso para la definitiva paralización de las granjas “va a ser largo”.
De todas formas, se ha mostrado satisfecho por la situación actual ya que, a su juicio, “es la primera victoria de una guerra que al final vamos a terminar ganando”, ha dicho.
Entre los meses de abril y mayo de este año se crearon en ambas poblaciones jareñas una plataforma y una asociación en contra de esta clase de industrias, argumentando que generarían problemas de abastecimiento de agua por la gran cantidad de líquido elemento que consumen.
Del mismo modo, ambos colectivos subrayaron la dificultad para tratar los purines de las dos macrogranjas porcinas, al igual que los malos olores que provocaría la actividad de las explotaciones granaderas.
Además, para hacer visibles sus reivindicaciones, el 31 de mayo, Día de Castilla-La Mancha, acudieron a la manifestación convocada en Talavera de la Reina en contra de la proliferación de macrogranjas porcinas en el territorio castellano-manchego.