BASF, con una gran planta en Marchamalo (Guadalajara), también presenta un ERTE

La empresa BASF ha presentado un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) para su negocio de pinturas para la automoción y ha asegurado el 85 por ciento del salario de la plantilla.

Según ha informado en una nota de prensa, la producción del centro de BASF en Marchamalo (Guadalajara) se ha visto profundamente afectada debido a la situación ocasionada por el coronavirus y el consiguiente paro de sus clientes del sector de la automoción.

Tras el acuerdo con la comisión negociadora y los sindicatos, la dirección de la empresa ha presentado al Ministerio el ERTE en el que los trabajadores afectados percibirán un complemento de hasta el 85 % del salario y mantendrá íntegros los beneficios.

"Este ERTE es una medida imprescindible para superar la situación extraordinaria y de amplia afectación en el sector, además de contribuir a la contención del virus y proteger de manera adicional la salud de nuestros trabajadores y contratistas", ha razonado.

El expediente incluye a la plantilla total del centro de BASF Española en Marchamalo, así como a la plantilla propia dentro de los centros de trabajo de tres de sus clientes principales, un colectivo de 540 empleados como máximo.

El paro de las plantas del centro de Marchamalo no será total, pues se mantendrá un cierto nivel de actividad, ha ampliado el comunicado en el que la empresa ha dicho estar convencida que esta medida es "necesaria" para asegurar los empleos del negocio de pinturas para la automoción.

Hasta el momento, el resto de los centros de producción de BASF siguen operando, en segmentos de primera necesidad como son los relacionados con los productos de higiene o los agroalimentarios.

"La prioridad de BASF es la protección de las personas, tanto dentro como fuera de los centros de producción y todas las decisiones se toman con esta premisa por encima de cualquier otra", ha apostillado.

Desde el inicio de la crisis del COVID-19, la compañía ha activado un paquete de medidas para frenar la propagación del virus y proteger a las personas, que van desde la implantación del teletrabajo a la restricción de movimientos o al incremento de las medidas de higiene, entre otras.