La Interprofesional del Aceite de Oliva Español ha mostrado al sector, reunido en Expoliva, sus nuevas iniciativas promocionales, empezando por la campaña nacional que aún están en marcha y que cuenta con la participación del actor José Coronado.
Una iniciativa lanzada hace casi un año y que se ha consagrado como la más exitosa puesta en marcha nacionalmente por la Interprofesional en su historia. De hecho, ya ha superado los 1.200 millones de impactos, alcanzando un recuerdo de campaña muy alto, por encima del 72 % de la población española. Los consumidores destacan acerca de la campaña los mensajes de origen y calidad.
El presidente de la Interprofesional del Aceite de Oliva Español, el castellano-manchego Pedro Barato, está convencido que la campaña ha dado en el clavo: "No sólo está teniendo un efecto muy positivo en la imagen que el consumidor tiene de nuestro producto. El propio sector se ha visto reflejado como nunca en una acción promocional de este calado. Su apuesta por la idea de calidad y de sostenibilidad, son el reflejo de los valores que todos compartimos".
Sostenibilidad
De hecho, la sostenibilidad va camino de convertirse en una de las principales palancas para movilizar el consumo del aceite de oliva. Así lo ha observado el sector y, por esa razón, el estand de Aceites de Oliva de España en Expoliva se ha vestido de "verde".
"Ya no basta con liderar los mercados en calidad o en producción. Ni siquiera una botella bonita. Ahora el consumidor quiere saber cómo producimos ese aceite. Quiere saber que su decisión de compra aporta un granito de arena para asegurar el futuro del planeta. Ese es el objetivo que ahora nos marcamos: dar visibilidad a los aspectos de sostenibilidad económica, social y medioambiental, ligada a la producción y trasladar esa información a los consumidores", explica Pedro Barato, que asume que aún queda mucho trabajo por hacer.
José Eugenio Gutiérrez, delegado en Andalucía de SEO Birdlife y coordinador del proyecto LIFE Olivares Vivos, afirma que el mayor olivar del planeta "sigue siendo un refugio excepcional de biodiversidad y los números que hemos sacado en esos 40 olivares de Andalucía que hemos estudiado en el Proyecto LIFE Olivares Vivos han sido sorprendentes: hay más de 180 especies de aves, hemos encontrado más de 60 de hormigas, más de 200 de abejas, más de 700 especies de plantas... Conserva una biodiversidad muy importante todavía. Y lo que hemos visto también es que tiene un extraordinario potencial para recuperar biodiversidad. Se ha demostrado en Olivares Vivos que poniendo este modelo de olivicultura en sólo tres años hemos tenido una recuperación muy significativa de flora y fauna".
Emilio González, profesor de Ingeniería Forestal de la Universidad de Córdoba, reivindica el papel del olivar como barrera contra el calentamiento global: "Cuando hablamos cambio climático no debemos pensar que es algo que va a venir en el futuro, sino que es algo que ya está sucediendo. Estamos padeciendo los efectos en términos de menores cantidades de lluvia, más errática. El olivar, gestionado de forma sostenible, está compensando el equivalente a las emisiones de 300.000 hogares de nuestro país. Eso es una realidad que estamos viviendo hoy en día. Una realidad que no es muy tangible para la sociedad en general que debemos poner en valor desde el sector agrario puesto que es un servicio que los agricultores están dando para todo el conjunto de la sociedad".
Fuente de energía
Y no menos importante se muestra el papel que el olivar puede jugar en el futuro en la búsqueda de energías más limpias y baratas. De hecho, un estudio de la Agencia Andaluza de la Energía estima que el olivar y sus industrias afines generan al año, de media, 6.433.423 toneladas de biomasa. O, lo que lo mismo, el equivalente en energía generada por 1.225.000 toneladas de petróleo. Solo el olivar andaluz tiene potencial para generar la más del 6 % de energía que emplea esa comunidad autónoma.
Pero lo más importante es que, ahora mismo, el sector del aceite de oliva es uno de los que mayor aprovechamiento energético de sus subproductos realiza en nuestro país. Se estima que, de media, se aprovecha en torno al 70 % del hueso de aceituna para usos térmicos, en torno a unas 360.000 toneladas. Un recurso que, Sebastián Sánchez, catedrático de Ingeniería Química de la Universidad de Jaén y director del Instituto Universitario de Investigación en Olivar y Aceite de Oliva, califica de auténtico tesoro: "¿Por qué tenemos que pagar un fueloil que viene de Arabia a doble precio, bueno a tres o cuatro veces el precio de nuestro propio combustible? Nosotros decimos con mucha frecuencia que Andalucía tiene un pozo petrolífero a bajo precio. El fueloil libre de impuestos puede estar a 90 céntimos, mientras que el hueso lo podemos comprar tranquilamente por 7 céntimos el kilo".
Contra la despoblación
Julio Berbel, catedrático y director del Departamento de Economía Agraria de la Universidad de Córdoba, lleva años estudiando la supervivencia del tejido social que va ligado al olivo y su industria: "Derrama riqueza en el territorio rural, que nos hace mucha falta. En los últimos cinco años todo el mundo habla mucho de la España vaciada, del reto demográfico y es que realmente tenemos un problema de despoblamiento. Hay zonas del interior de Castilla que es un desierto demográfico que tiene la misma densidad de población que Siberia, no vive nadie. Eso no ocurre en Andalucía y ni dónde hay olivar. Dónde hay olivar hay una cierta densidad y cuando hay densidad hay un pueblo, que tiene un ambulatorio, un colegio, una escuela. Hay vida".