El Gobierno de Castilla-La Mancha ha declarado proyecto prioritario la construcción de dos plantas de producción de biometano, una de ellas en Campo de Criptana y otra en Socuéllamos.
Así consta en sendas órdenes de la Consejería de Desarrollo Sostenible, que publica en su edición de este lunes el Diario Oficial de Castilla-La Mancha y recoge Europa Press.
En el caso de la de Campo de Criptana, está promovida por la mercantil Basitarso, S.L. Dice el departamento que dirige Mercedes Gómez que el proyecto deberá ejecutarse de conformidad con la solicitud presentada, en especial en lo relativo a los plazos, al volumen de inversión y al empleo, y cumplir con las obligaciones derivadas de las autorizaciones sectoriales y demás procedimientos administrativos que le sean de aplicación. Cualquier modificación de dichos términos podrá dar lugar a la revocación de la autorización.
Mientras, la planta de Producción de Biometano de Socuéllamos está promovida por la mercantil Bravoita, S.L. El proyecto deberá ejecutarse de conformidad con la solicitud presentada, en especial en lo relativo a los plazos, al volumen de inversión y al empleo, y cumplir con las obligaciones derivadas de las autorizaciones sectoriales y demás procedimientos administrativos que le sean de aplicación. Cualquier modificación de dichos términos podrá dar lugar a la revocación de la presente orden.
Contra sendas órdenes, que ponen fin a la vía administrativa, cabrá interponer recurso contencioso-administrativo ante la Sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha, en el plazo de dos meses contados desde este martes.
De conformidad con lo establecido en la Ley 5/2020, de 24 de julio, de medidas urgentes para la declaración de proyectos prioritarios en Castilla-La Mancha, las presentes órdenes y, en consecuencia, la declaración del proyecto como prioritario surtirá efectos a partir de este martes.
La Junta estará, vigilante
El Gobierno de Castilla-La Mancha va a estar muy vigilante para que los proyectos de plantas de biometano cumplan las condiciones mínimas de salubridad para la ciudadanía y por ello se encuentra trabajando en el Plan de biometano en Castilla-La Mancha, tal y como ha aseverado el director general de Calidad Ambiental, Tomás Villarrubia.
En la presentación del Centro de Control de Calidad del Aire de Castilla-La Mancha este lunes, Villarubia ha remarcado este lunes que su departamento "lo tiene muy claro" y "no va a consentir que ningún proyecto no reúna estas condiciones mínimas de salubridad". "Las plantas de biometano ahora mismo tienen una tecnología puntera y con unos controles odoríferos muy restrictivos".
A preguntas de los medios, tras la publicación en el Diario Oficial de Castilla-La Mancha de la declaración como proyectos prioritarios de dos plantas de biometano en Campo de Criptana y Socuéllamos, así como el trámite de información pública de la construcción de una planta de producción de biometano en Caracuel de Calatrava, Villarrubia ha remarcado que analizan "todos y cada uno de los proyectos de biometanización", que "tienen que reunir unos mínimos para poder ser informados favorablemente fundamentalmente en lo que a materia de emisiones de gases se refiere".
En su opinión, los proyectos de biometanización son una solución al problema de gestión de residuos en Castilla-La Mancha, por lo que se trabaja en la elaboración de un plan regional dirigido "a establecer las reglas de juego", que todos los promotores pueden seguir a la hora de plantear estas iniciativas "con unas exigencias muy estrictas".
Así, se pretende acabar "con lo que ya ocurrió hace bastantes años", con "proyectos relativamente deficitarios o mediocres" que crearon "una mala imagen a un procedimiento de gestión de residuos que es necesario". Un planteamiento que, a juicio del director general de Calidad del Aire, contribuye con el tejido productivo e industrial de Castilla-La Mancha, genera también un impacto social positivo de generación de puestos de trabajo y "fundamentalmente de eliminación o valorización de esos residuos convirtiéndolos en biogas y combustible".
En cuanto a los residuos que se generan "depende de la dieta del proyecto" --desde lodos de depuradora, purines, vinazas, residuos agrarios-- ha afirmado Villarrubia, que ha insistido en que los gases son tratados de forma que la emisión a la atmósfera de gases nocivos es prácticamente cero".