El alcalde de Toledo, Carlos Velázquez, y varios concejales del Gobierno Municipal han asistido este domingo a la celebración de la Virgen de la Cabeza, la primera romería de la ciudad.
Velázquez ha asegurado que “es un honor” asistir como alcalde y ha agradecido el trabajo que está realizando la Hermandad de la Virgen de la Cabeza, con su presidente Ricardo Alba, la Junta Directiva, y, en definitiva, todas las Hermandades de Gloria de la ciudad, “porque se han empeñado en recuperar una tradición importantísima que forma parte de la historia religiosa, cultural y patrimonial de Toledo”.
El alcalde ha hecho referencia a las nuevas iniciativas que han puesto en marcha, como las rutas “Entre Ermitas” que comenzaron la pasada semana y continuarán las siguientes y permitirán a los toledanos descubrir una parte de la ciudad más desconocida y ensalzar también su valor medioambiental.
Por último, Velázquez ha invitado a los toledanos a cuidar “ese patrimonio inmaterial” como son las romerías que culminarán con la celebración de la Semana Grande de la ciudad. “Un Corpus Christi, que este año queremos que sea especial, para demostrar que ese jueves, Toledo volverá a brillar más que el sol”, ha concluido el alcalde.
La Ermita de la Virgen de la Cabeza está situada en un enclave privilegiado frente al Casco Histórico, entre cigarrales, y los primeros escritos de esta advocación datan de 1605, aunque la ermita, que fue un beaterio mozárabe en el siglo XII, se reedificó en 1859. Siguiendo con la tradición, al finalizar la celebración eucarística, la Hermandad de la Virgen de la Cabeza ha ofrecido a los asistentes migas y limonada.