Cartas al Director

DOMINGO: UN DÍA DE FIESTA - Benito (13 de marzo de 2018)

13 marzo, 2018 10:16

Unas veces se gana y otras se aprende. Esto se lo oí decir a alguien no hace mucho y lo hice mío. No me imaginaba que tan pronto lo iba a utilizar. Ganar, aprender. Falta enseñar. Uno de mis  verbos favoritos. Falta que alguien te enseñe a vivir  cuando se empiezan a marchar los amigos. Esos de los que habla Amaral en su canción: son mis amigos, dice. Y dice bien. Sudándome lo que hayan vivido o dejar de vivir. El domingo  de madrugada se fue una de las mejores personas que he conocido y de la que siempre estaré orgulloso. Cuando estaba conmigo estaba pendiente de estar con alguien más. Ese era su valor. El abarcar cuanta  más  gente, mejor. Montones de años hace que le conocí y de todas las maneras posibles. Nadie me ha valorado como él lo hacía. Qué vería en mí,  todavía es algo que  desconozco.

Estar con él era un día de fiesta. Que por algo se llama Domingo. La noche que murió, alguien - él sabe quién fue-, me despertó para decirme que llegó la hora. Lo supe. Su cuñado me  llamó después. Y ahí sigo derrumbado. Imaginándomele pasando por mi casa, llamándome para tomar un té y, eso sí, intentando que alguien más estuviese con nosotros. Como cuando llenaba su casa de quien fuese, qué más daba, cuantos más mejor. Me he reído mucho con él. Ahora toca llorar. Sé que dirá que no lo haga. Echaré de menos su cultura. Importante  valor que también nos unió. Descansa en paz, Domingo, que hasta en ese día te fuiste. Lo que para mí siempre  has sido: un día de fiesta. Gracias, amigo.