La idea de Cospedal que puede cambiar por completo el panorama político en Castilla-La Mancha
Las reglas del juego podrían cambiar de cara a las elecciones municipales previstas para el mes de mayo de 2019, dentro de poco más de un año y medio. Así, al menos, lo cuenta El Confidencial Digital, que citando fuentes gubernamentales asegura que Mariano Rajoy ha vuelto a rescatar el proyecto de reforma de la actual ley electoral para que en los ayuntamientos gobierne la lista más votada.
El citado medio explica que Rajoy confía en que Ciudadanos y PNV, que ya han votado a favor de los Presupuestos de 2017, también apoyen esta reforma electoral que podría cambiar el panorama político muncipal en nuestro país, evitando que los partidos que no han ganado las elecciones se alíen o lleguen a acuerdos de investidura para gobernar, dejando en la oposición al partido más votado por los ciudadanos.
Desde Moncloa explican que el PP ya podría haber aprobado sin problemas esta reforma durante la pasada legislatura, cuando los 'populares' tenían mayoría absoluta en el Cogreso. No obstante, esa maniobra se hubiera considerado “un pucherazo”, ya que se amagó con presentarla a escasos meses de las elecciones y porque “los partidos, sabiendo que la podíamos aprobar solos, la iban a rechazar”. Sin embargo, el escenario ahora es distinto, ya que la reforma se aprobaría con el respaldo de otras formaciones políticas. Una circunstancia que, pese a la más que segura negativa de PSOE y Podemos, le daría más legitimidad.
Las fuentes consultadas por El Confidencial Digital explican, además, que es la secretaria general del PP y presidenta de la formación en Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, quien ha insistido a Rajoy, con el apoyo de otros barones regionales, en la necesidad de aprobar esta ley. Precisamente, la propia Cospedal fue afectada directa del actual sistema, puesto que, pese a ganar las elecciones autonómicas de 2015 en Castilla-La Mancha, no pudo repetir como presidenta de la Junta porque que Podemos firmó un acuerdo de investidura con Emiliano García-Page que permitió al socialista llegar al Palacio de Fuensalida.
En estos momentos, después de escuchar a la secretaria general y a varios líderes regionales, Rajoy parece decidido a llevar a cabo la reforma siempre y cuando logre previamente los apoyos necesarios para llevarla a cabo. De esa forma, sería una reforma “consensuada” que dejaría sin argumentos a PSOE y Podemos.
¿Cuál sería la fórmula elegida? Eso por el momento no lo cuenta El Confidencial Digital, aunque el PP ya presentó en el Congreso, en julio de 2015, una proposición de ley en ese sentido, aunque luego no la llevó a cabo. Proponía que si alguna lista consigue más del 35 % de los votos manteniendo una diferencia de al menos cinco puntos con la siguiente candidatura, o si logra el 30 % de los votos y 10 puntos sobre el siguiente, se haga con el Gobierno municipal de manera automática. En caso de que ningún partido cumpla ambos requisitos, se celebraría una segunda en la que participarían todas los partidos que superen el 15 % de los votos. En esa segunda vuelta, si un partido logra el 40 % de los sufragios o se impone por siete o más puntos al siguiente, se le adjudicaría la mayoría absoluta directamente. Si ningún partido alcanza esos requisitos el reparto de concejales se haría como en el sistema actual.