El consejero de Sanidad, Jesús Fernández, es el hombre tranquilo, el que mantiene el tipo y no se deja llevar por las urgencias de la actualidad ni las presiones de la oposición, ya se hable de listas de espera, del estado de su departamento o del ritmo de construcción de los nuevos hospitales. En unas declaraciones a la agencia Europa Press este miércoles, Fernández ha dejado claro que "esté quien esté" al frente del Gobierno regional la próxima legislatura los hospitales en construcción -Cuenca, Albacete, Guadalajara, Toledo y Puertollano- tienen un porcentaje de ejecución "que no van a poder parar". Es decir, que gobierne quien gobierne será el ejecutivo de García-Page el que habrá posibilitado que la construcción de estos proyectos haya entrado en una fase irreversible que ya no podrá detenerse.

Aunque no da por hecho que el PSOE vaya a seguir gobernando, lo que sí ha dejado claro el titular de Sanidad es que en ninguno de los cinco casos se inaugurarán los centros antes de las elecciones de 2019. Es decir, que las inauguraciones de nuevos hospitales no van a poder usarse como instrumento electoral antes de los próximos comicios. De ahí puede deducirse igualmente que el trabajo que se está desarrollando desde el actual ejecutivo para terminar unas infraestructuras tan necesarias no está motivado por ningún tipo de interés electoral.

En cualquier caso es de agradecer la franqueza de Jesús Fernández y su deseo de ver acabados los hospitales porque, tal como reconoce, en “muchas” de las áreas de los actuales se da un trato “indigno” a los pacientes.

Por lo demás, el consejero ha informado que en el caso del nuevo hospital de Toledo en estos momentos hay 800 trabajadores, por lo que ya se ha alcanzado "velocidad de crucero absoluta”. Esos trabajadores han tenido que demoler un siete por ciento de la parte que ya estaba construida a fin de ajustar la superficie al nuevo Plan Funcional y ha apuntado que ahora están construyendo esos 23.000 metros cuadrados de más que conlleva el proyecto.

En el caso de Guadalajara están negociando con una de las dos empresas que edifican el hospital y que no quiere continuar en el proyecto. "No se ha parado la obra, aunque va mucho más lenta y está generando un retraso con respecto a las previsiones porque llevamos dos meses negociando con la empresa". Retraso lleva también la apertura del aparcamiento, por las "miles de pegas" que, según ha criticado, pone el ayuntamiento.

Las obras del hospital de Cuenca "van muy bien" después de los millones de indemnización que hubo que pagar a la dirección de obra y a la constructora. En Puertollano se está terminando el Plan Funcional y el siguiente paso será comenzar los trámites para licitar la dirección de la obra, mientras que en el primer trimestre del 2018 está previsto licitar la segunda fase de las obras del hospital de Albacete.