La exconcejala socialista de la región vuelve a liarla parda, ahora con la Guardia Civil

Nunca pasa desapercibida. Sea por convencimiento o porque ha hecho de la provocación un estilo de vida profesional, la exconcejala socialista de Guadalajara y actual colaboradora en medios de comunicación Beatriz Talegón ha vuelto a armar un lío con sus llamativas opiniones, enfrentándose en este caso a la mismísima Guardia Civil. El rifirrafe ha llegado a tal grado que El Español titulaba ayer: “Beatriz Talegón pide `disculpas´ a la Guardia Civil y su ridículo es aún mayor”.

Talegón ha recibido una dura crítica por parte de la Guardia Civil después de firmar una noticia en Diario 16 en la que aseguraba que habían "interceptado a dos agentes de la Guardia Civil intentando entrar en la residencia de Puigdemont en Bélgica".

"Atención a esto, porque es GRAVE", decía la propia Talegón en su cuenta de Twitter.

Tras ese mensaje, la cuenta oficial de la Guardia Civil ha respondido con dureza a Talegón: "¿Son guardias civiles o personas disfrazadas de guardias civiles?...es que no es lo mismo ...igual sería GRAVE no rectificar, ¿no?".

Talegón pidió disculpas a continuación, pero fue peor el remedio que la enfermedad ya que dejó a todos boquiabiertos con sus consideraciones sobe la Guardia Civil.

Tras el tuiter de la benemérita, Talegón anunció en Twitter que estaba preparando un vídeo en el que le pediría disculpas al Cuerpo armado. Pero en el vídeo, lejos de disculparse y rectificar la emprende con la Guardia Civil tras repasar, no se sabe muy bien para qué, los titulares de los medios sobre el asunto, como si hubiera dudas sobre los falsos guardias civiles que habían intentado entrar en la residencia de Puigdemont en Bélgica.

Sus argumentos para justificar el grave error de su titular son la apoteosis de su desvarío con este asunto: "¿Cuando alguien se me presente con el uniforme y se identifique como Guardia Civil tendré que pensar que se trata de alguien disfrazado?", pregunta, para acabar instando al Instituto Armado a interponer una denuncia por "suplantación de personalidad" y sentenciar que lo fácil es "señalar con el dedo a los que informamos".

El vídeo de Talegón, cuyo rostro ha cambiado de forma visible en los últimos tiempos, no tiene desperdicio: