Cospedal en estado puro: Muy enfadada y coherente
Como ya habíamos advertido desde estas páginas, la expresidente de Castilla-la Mancha, María Dolores de Cospedal, no tenían intención alguna de ser candidata a la Alcaldía de Madrid. Pensábamos, y así lo dijimos en varias ocasiones, que los rumores sobre su posible candidatura se habían lanzado de forma interesada, en unos casos para apartarla de la carrera hacia las Europeas y en otros para utilizarla en interés de otros posibles candidatos al ayuntamiento o a la Comunidad madrileña. El caso es que Cospedal debió molestarse desde el principio con el asunto y así se lo dijo a algunos de sus allegados, pero en vista de que no reaccionaba ante los cada vez más intensos rumores, llegaron a pensar que podría haber cambiado de opinión y que quizá estaba sopesando la opción madrileña. Hubiera solucionado varios problemas a mucha gente y le habría quitado varios quebraderos de cabeza a Pablo Casado, que se está encontrando con verdaderas dificultades para encontrar un candidato adecuado para un reto tan determinante como es el ayuntamiento de Madrid, donde el PP nacional se la juega.
Sin embargo, Cospedal no había dudado ni un instante. Consecuente con su forma de ser, y ya verdaderamente enfadada con el asunto al ver la dimensión que tomaba, emitió el miércoles un comunicado tan determinante en el contenido como duro y escueto en las formas. La expresidente de Castilla-La Mancha ha sido siempre hermética al tomar decisiones de este tipo, tanto para negarlas como para confirmarlas. En este caso ha dicho lo que no va a hacer, pero nadie sabe, ni los más cercanos, cuáles son sus planes de futuro.
En cualquier caso ha vuelto a mostrar su genio y su coherencia y ha afirmado "con toda claridad" que ni tiene ni ha tenido "nunca" intención de optar a ser candidata por Madrid. Y ha lanzado un mensaje muy claro a los que especulan con su futuro: "Les ruego se abstengan de opinar sobre mis deseo o intenciones, los cuales, obviamente, no conocen, ya que se encuadran en la esfera de mi intimidad". Cospedal en estado puro.