Aunque distantes en lo ideológico, la trayectoria profesional de José Bono y María Dolores de Cospedal tienen muchos puntos coincidentes. El socialista es abogado, fue presidente del Gobierno de Castilla-La Mancha y ministro de Defensa con Zapatero. La 'popular' también se licenció en Derecho, también fue presidenta del Gobierno de Castilla-La Mancha y ministra de Defensa con Rajoy. Además, ambos pelearon por liderar sus partidos a nivel nacional y fracasaron en el intento. Ahora los dos están retirados de la primera línea política pero, pese a ello, su animadversión cultivada durante años sigue generando interés.
En noviembre de 2018, tal y como informó EL DIGITAL, Bono ya aprovechó un acto público para arremeter contra Cospedal, a la que acusó de denunciarle cinco veces ante la Fiscalía."Las cinco se archivaron, porque ponía en duda cómo había conseguido mi patrimonio, que decía que lo había hecho de forma ilícita. Lo que yo desconocía por aquel entonces es que mientras ella me denunciaba, paralelamente hablaba con el comisarioVillarejo”, aseguraba el también ex presidente del Congreso de los Diputados. Lo cierto es que el político albaceteño recibió varias denuncias para que se investigara su patrimonio y la forma en que lo había conseguido, todo ello en un momento en el que la mayor parte de los medios nacionales se hicieron eco de las publicaciones que inicióLa Gaceta en ese sentido.
Bonosiempre ha creído queCospedalestaba detrás de la durísima campaña que se lanzó contra él a raíz de las informaciones deLa Gaceta, que entonces dirigíaCarlos Dávila. Eso era una simple sospecha, lo mismo que lo de las cinco denuncias, ninguna de ellas firmada porCospedal. En todo casoBonosalió indemne de todo aquello y años después vio salir de la políticaa su rival por la puerta de atrás, tras filtrarse unos audios junto a su marido, el empresario Ignacio López del Hierro, y el ex comisario Villarejo, grabados en su despacho de la sede del PP.
Cuando ha pasado más de un año de todo aquello, ahora Bono está de gira mediática para promocionar su nuevas memorias, bajo el título 'Se levanta la sesión', y durante una entrevista en el periódico 20 Minutos le han preguntado si guarda rencor a Cospedal como supuesta inductora, según se puede leer en el libro, de una campaña de desprestigio contra él. Y la respuesta, sin duda, tiene el toque ácido que caracteriza al veterano socialista: "Rencor no, porque en su pecado ha llevado la penitencia. Tuvo que irse de la política de un modo poco digno cuando se descubrió que entre ella, su marido y el comisario Villarejo, que grababa las conversaciones, trataban de entorpecer la labor de la justicia. Es un modo malo de salir política, pero quizá es el que se buscó".
Por contra, al ser cuestionado sobre la opinión que le merecePablo Iglesias, el líder de Unidas Podemos y futuro vicepresidente del Gobierno de España si Pedro Sánchez supera la investidura, Bono asegura que discrepan "en lo ideológico" pero tienen "buena relación personal", al punto que el socialista reconoce que habló con él el día de antes de producirse la entrevista.