La reciente intervención de la consejera de Desarrollo Sostenible de Castilla-La Mancha, Mercedes Gómez, en las Cortes autonómicas ha impulsado las expectativas de los cazadores sobre el Pacto por la Caza firmado el pasado mes de mayo por el sector con el presidente de la Junta, Emiliano García-Page.
Los cazadores, que ya en mayo mostraron su satisfacción por un pacto que refuerza la actividad cinegética en Castilla-La Mancha, ven ahora como la consejera Mercedes Gómez reafirma los compromisos adquiridos en ese documento y el Ejecutivo autonómico empieza a cumplirlos.
El Gobierno castellano-manchego, explicó Gómez en su intervención parlamentaria, avanza en la defensa y promoción de la caza y la reconoce como "necesaria" para el medio ambiente y el entorno rural, considerando la actividad cinegética como un elemento fundamental para la conservación de los espacios naturales, el control de la población y la mejora de la biodiversidad. También, a juicio de la consejera, ayuda en la lucha del Ejecutivo regional, contra la despoblación.
Según Mercedes Gómez, el Pacto por la Caza mejorará la formación de los cazadores, vigilantes y especialistas en control y ayudará a la conservación de los hábitats de algunas especies, además de mantener un diálogo permanente con el sector para avanzar siempre en la dirección correcta.
“Estamos avanzando en todos los compromisos adquiridos pues somos conscientes de que el sector cinegético es fundamental en una región como la nuestra”, ha dicho Gómez, con siete millones de hectáreas cinegéticas y 5.700 cotos de caza, que representa el 1,7 por ciento del PIB regional; y con una capacidad dinamizadora fundamental para la economía, generando más de 14.000 empleos directos y 600 millones de euros aproximadamente y 115.000 licencias.
De esta forma, la consejera ha asegurado que el “Gobierno regional de García-Page se cree la caza, lo hemos creído siempre y por eso el presidente firmó el pacto que ya está en marcha”.
Un Pacto que fue suscrito por asociaciones que representan a unos 21.000 cazadores, 1.200 cotos y que, en el terreno, aglutinan más de cinco millones de hectáreas. “Esa población cazadora ya conoce el pacto, cómo se está llevando a cabo y las posibles medidas en las que vamos avanzando para cumplir con lo aún pendiente", afirma la consejera.