Si hacemos caso a muchos medios de comunicación, a los partidos políticos de derecha y  una serie de gente de la calle, parece que se llega a la conclusión de que Pedro Sánchez es un irresponsable o un monstruo que quiere destruir España solamente por el egoísmo de seguir siendo presidente. 

Me parece que se están sacando las cosas de quicio, ni he creído ni creo que Sánchez haya hecho la más mínima concesión a los partidos independentistas sobre la soberanía  de Cataluña, ni creo que se rompa España ni tampoco los partidos políticos y el PSOE como así se ha dado a entender concretamente por el presidente de CLM, que por cierto y hablando de otra cuestión, es el único que tiene en su gobierno a dos consejeros de Podemos, partido al que también se le pone en la picota y que se pusieron muchas pegas en épocas pasadas para que Sánchez gobernara con su apoyo  acusándole en muchos foros de que el PSOE se está podemizando. Yo estoy  de acuerdo con ese apoyo desde el principio de la legislatura. 

A Pedro Sánchez se le ataca por tierra, mar y aire y es curioso como oyes hablar a la gente en las conversaciones cotidianas del artículo 155 como si fueran grandes expertos en conocer su contenido, considerando que ya con su aplicación se resolvería un problema tan serio, como si un médico con una tirita curase una enfermedad grave que requiere  otro tratamiento. 

Se han oído durante esta semana cosas en el Parlamento Español que yo no había oído en los cuarenta y tres años de democracia, cosas que me parecen graves y que, a mi juicio, no contribuyen a serenar los ánimos, es más se prestan a encresparlos  respecto a Cataluña. 

Considero que Sánchez hace lo que debe, apostando por el diálogo en Cataluña, el diálogo es fundamental en la democracia y la política es eso, diálogo, diálogo y más diálogo porque las soluciones drásticas suelen dar malos resultados y de consecuencias poco deseables. Un problema político como el de Cataluña se tiene que solucionar con propuestas políticas. 

Pedro Sánchez es presidente de Gobierno con el apoyo de todos estos partidos independentistas, pero lo es por una moción de censura y no por una investidura, que es totalmente diferente, pues en la investidura se traza un programa  de gobierno y en virtud de ese programa se establecen alianzas y se apoya o no, pero una moción como es en este caso se puso y se apoyó sin contrapartidas respecto a la soberanía de Cataluña a pesar de todo lo que se habla, pues yo no tengo noticia alguna de que Sánchez haya cedido en nada, como apunto al principio, sobre la soberanía catalana y es que  la derecha le considera un ocupa de la presidencia del gobierno, pero no mira la razones del por qué a Rajoy se le echó de la Moncloa perdiendo incluso el apoyo de un PNV que días antes había apoyado los presupuestos del PP. 

Conviene que los ánimos se calmen, que se haga política en todos los ámbitos, incluido el tema catalán, porque es de suma importancia y vistos los hechos del gobierno se juzguen, se valoren y se vote cuando sean las elecciones y que para juzgar se hable también del salario mínimo, subida de las pensiones, de la sanidad, la educación, la dependencia, infraestructuras, el tema territorial en su conjunto, la ley mordaza, la reforma laboral y tantas cosas más que servirán para ver si Sánchez continúa o no en la Moncloa. 

Si la música es siempre la misma y estamos tocando todos los días la misma canción con Cataluña, mal vamos y no se podrán solucionar otros problemas, que a lo mejor interesan más a los ciudadanos, como tener una vivienda digna, llegar a fin de mes, que los hijos tengan un trabajo remunerado adecuadamente y luego tal vez ese otro problema catalán no les interesa tanto porque ya tienen cubiertas las necesidades básicas y pasan del tema. 

Estoy convencido de que Pedro Sánchez no es ni un irresponsable, ni un monstruo, ni nada de esas barbaridades que se oyen diariamente en los medios y en la calle, es un político de raza, con capacidad de aguante, decidido y comprometido con España y los españoles. 

Alberto González González. Militante PSOE de Talavera de la Reina