#QuédateEnCasa, pero no te quedes solo
Durante estos últimos días hemos escuchado una y otra vez el mismo mensaje, “quédate en casa”, como una recomendación que, con la multiplicación de los contagios de COVID-19, ha pasado a ser una imposición, porque es la única forma posible para frenar su propagación entre la población.
No sirven excusas. Hemos tenido que reinventar hasta ahora una sociedad acostumbrada a encontrarse, a saludarse cariñosamente con abrazos y choques de manos y que emplea sus días en las oficinas, para darnos cuenta que medicamentos tan simples como el teletrabajo funcionan, siendo el insultante futuro que teníamos ante nosotros y no nos hemos atrevido a emplear por miedo a cambiar lo que siempre hemos hecho.
Sin embargo, un virus nos ha abierto las puertas de par en par para descubrir que, a corto plazo, para contribuir a las tan necesitadas conciliaciones familiares y la implicación en la corresponsabilidad en el cuidado familiar y del hogar, quizás sólo sea necesario apostar por lo nuevo porque, entre otras cosas, podemos seguir siendo igual de productivos, contaminamos menos al no tener que desplazarnos hasta nuestro lugar de trabajo y hasta las empresas ahorran evitando gastos en luz, agua y otros servicios derivados de nuestra presencia.
Pero, más allá de lo que puede ser, debemos seguir enfocando nuestros esfuerzos en otras luchas igualmente necesarias. Ahora, más que nunca, debemos estar pendientes de las personas dependientes, de las personas mayores y de nuestro medio rural, donde persiste otra pandemia que hace estragos, como es la soledad y la falta de respaldo a nuestros agricultores y ganadores.
Debemos poner todos los mecanismos en marcha para que no se sientan solos, para que estén acompañados y para que reciban todos los servicios necesarios para que tengan una calidad de vida digna que es lo que todos merecemos. En este sentido, queremos predicar con el ejemplo, por lo que algunas de nuestras delegaciones, como la de Almería, han puesto a disposición a sus socias para realizar la compra a aquellas personas especialmente vulnerables a las que salir de casa podría costarles la vida.
Del mismo modo, se debe enfatizar la protección del medio rural como elemento fundamental para la seguridad alimentaria, poniendo en valor el trabajo de todas las mujeres y hombres que cada día producen en nuestros campos y que hoy permiten que los supermercados puedan abastecer nuestras despensas en medio de esta fuerte crisis social.
Esta situación pone de manifiesto que:
- Es necesaria la conectividad plena en nuestros pueblos
- Es necesario el uso de las tecnologías accesibles para las personas mayores
- Es necesario habilitar servicios on-line de fácil acceso en todos los entes públicos
- Es necesario que los trabajadores autónomos dispongan de seguros sociales que prevengan de situaciones como las que se están viviendo en estos momentos
- Son necesarios protocolos de actuación actualizados en los Centros de Días y Residencias de Mayores, que eviten la muerte de personas mayores por contagio
- Es necesario el respaldo a nuestro sector primario, respaldando el trabajo diario de mujeres y hombres con medidas que beneficien la incorporación de más personas en el sector
En AFAMMER estamos comprometidas con la sociedad, con especial atención en un entorno más vulnerable, como es el medio rural, donde llevamos trabajando 38 años, siendo pioneras en la reclamación de sus derechos en todos los foros nacionales e internacionales. Por eso, en estos momentos, seguimos atendiendo todas las solicitudes que nos llegan de forma telemática, ofreciendo los servicios que a diario ponemos a tu disposición a través de nuestros correos electrónicos y nuestras redes sociales.
Quédate en casa pero no te sientas solo. Nos tienes a tu lado.