A ti, que vas al supermercado y los precios cada día están más altos. Que te piensas si enchufar la calefacción porque la luz se ha disparado. A ti, que estudiaste, te formaste, y ahora trabajas duro, llevas a tus hijos a la escuela infantil, al colegio, a las extraescolares. A ti, que antes decían que formabas parte de la clase media, la que sostiene el Estado del Bienestar, pero tú te preguntas: "¿Clase media? ¡clase exprimida! Si apenas llego a fin de mes. Si no me suben el sueldo desde hace años. Si mis ingresos cada vez son menos y mis gastos cada vez son más". A ti, que eres como la mayor parte de los ciudadanos de nuestro país, que ves cómo Pedro Sánchez dispara el gasto en pensiones y piensas: "¿Quién va a pagar todo esto? ¿Quedará algo para cuando me jubile yo?" O peor: "¿Qué futuro le vamos a dejar a nuestros hijos?" A ti, que estás harto de que la política se haya convertido en un Madrid-Barça, con mucha pelea, pero pocas soluciones. Te entiendo perfectamente, ¿sabes por qué? Porque me pasa lo mismo que a ti.

Tengo tres hijos y quiero dejarles en herencia una sociedad mejor. Moderna, próspera, libre. Que no tengan que marcharse fuera por no tener en nuestra tierra oportunidades para prosperar en todos los sentidos. Que tengan lo que no tuvimos nosotros. Lo que nuestros padres ni siquiera soñaron. Eso es lo que siempre quise. Por eso me metí en política, harta como estaba –y sigo estando– de los viejos partidos que solo se ponen de acuerdo a la hora de taparse los casos de corrupción y repartirse los jueces como si fueran cromos, pero que son incapaces de alcanzar pactos de estado para fomentar la natalidad, mejorar la educación de nuestros hijos, reforzar la sanidad, impulsar la investigación y la ciencia o preservar nuestro patrimonio natural. "¿De verdad tenemos que conformarnos con políticos que ni siquiera conocen los problemas que afrontamos en nuestra vida diaria?"

Algunos estamos aquí por lo mismo por lo que tú te levantas cada mañana: porque queremos legar a nuestros hijos un país, una región, unas ciudades, mejores que las que nos encontramos tú y yo. La realidad, hoy, es que la vida es cada vez más cara, que los jóvenes cada vez se independizan más tarde, que tienen peores empleos y que probablemente tú y yo no podamos cobrar una pensión como la de nuestros padres. Si crees que ha llegado el momento de cambiar las cosas para cambiar tu futuro y el de los tuyos, nosotros no te vamos a fallar. Porque fallarte a ti sería fallarnos a nosotros mismos, fallar a nuestros propios hijos. Somos padres, madres, clase media convertida en clase exprimida. Por eso alzaremos la voz cuando todos callen y seguiremos trabajando cuando todos se cansen.

Sin la clase media no hay Estado del bienestar. No hay servicios públicos, ni empleo de calidad, ni planes de natalidad. Por eso no hay mejor política de futuro que salvar a la clase media. Es hora de optimizar el gasto en la Junta y los ayuntamientos, hay que controlar el despilfarro de los recursos y las duplicidades en la Administración, es hora de invertir en lo que garantiza la educación y el progreso de nuestros hijos, de usar la administración no para exigir más esfuerzos económicos a la clase exprimida sino para devolvérselo con lo que más nos importa: cuidando el bienestar de los tuyos. Invirtiendo y apostando por la ciencia, la innovación, garantizando la calidad en las residencias de los que nos han cuidado siempre, y recortando en enchufados y en propaganda.

Después de cuarenta años de régimen socialista, lo tengo claro, Castilla-La Mancha es la primera región de toda España con la inflación más alta, la tasa más elevada de desempleo femenino, estamos a la cabeza en presión fiscal, fracaso educativo y listas de espera para operaciones quirúrgicas y es una de las comunidades autónomas en las que más ha caído la natalidad en los últimos años. "¿No crees que son motivos suficientes para proceder a un cambio? ¿De verdad tenemos que conformarnos con los políticos de siempre como si no pudiéramos aspirar a más? ¿En serio nuestros hijos se merecen una región con este panorama? Yo estoy convencida de que no es así. Sé que nuestra región puede y debe aspirar a mucho más. Tenemos potencial para ello. Por eso he dado un paso al frente, rodeada del mejor equipo, igual que tú te levantas cada día a pelear contra las adversidades".

"Lo tenéis muy difícil", me dicen. "¿Acaso alguna vez tú y yo lo tuvimos fácil?"

 

Carmen Picazo, candidata de Ciudadanos a la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha.