La riqueza de las zonas despobladas

"Buenasbodas de la Jara, al verte se van mis penas. Lo mejor que hay en España, son tus mujeres jareñas. Buenasbodas de la Jara, pueblo de gran corazón, son tus gentes, labradoras del Trabajo y Tradición"

Así comienza la canción que fue compuesta en San Blas para mi pueblo natal, donde he tenido la oportunidad de festejar la Tradición de la Matanza promovida por los jóvenes de la Asociación Recreativa Cultural "La Garganta" y que en tantos otros pueblos también se viene desarrollando. Del cerdo, hasta los andares y si es criado en dehesas y alimentado con bellotas, todo un deleite.

Por la mañana migas extremeñas y al mediodía un guiso de carne en caldereta para alimentar a todos los que acudieron al encuentro, con muchas ganas de seguir disfrutando de todo aquello que nos une, como es la Música y las Tradiciones, lo cultural nos enriquece y permite que sigamos realizando eventos para mantener vivos nuestros pueblos mientras avanzamos hacia el futuro.

El pasado Puente de la Constitución y la Inmaculada, lo comencé con el grupo de Mujeres Girasoles, dando luz a "Cuenca la Bella" y recorriendo algunos establecimientos emblemáticos de hostelería de una gran Ciudad Patrimonio de la Humanidad que estaba repleta de turistas, también pude sentir el calor de las personas y el fuego de las luminarias de Fuentelespino de Haro donde los vecinos festejaban esta costumbre ancestral que es alma, esencia etnográfica y humo purificante para campos y personas. Además, en esta ocasión se brindaba por el gran logro de unidad y alianzas conseguido, al ser nombrado como el Pueblo más Bonito de Cuenca en el Concurso de Castilla la Mancha Media. Mi estancia en La Mancha de Cuenca se completó con una Experiencia cultural en Uclés, con la presentación del libro "El Canto del Grajo" de Ana Isabel Fernández, procedente de El Pedernoso. También viví la emoción, la acogida y el fervor popular de la procesión más larga de la cristiandad, la del Vítor de Horcajo de Santiago, desde el balcón de la casa de Andrés, Caballero Portador del Estandarte. El Vítor es una celebración de gran intensidad emocional y Fe, que hay que vivir al menos una vez en la vida.

De La Mancha de Cuenca a Buenasbodas, en los Montes de Toledo, en la Comarca de la Jara compartida también con Extremadura, donde he disfrutado de momentos con los vecinos de toda la vida, y también con aquellas mujeres valiosas que trabajan en la hostelería y en servicios tan necesarios para los Pequeños Pueblos, como son los bares y las pequeñas tiendas. Desde mi amiga Lucía, que trabaja en el Tradicional Restaurante del Hostal el Labrador de Alcaudete de la Jara y que recibe clientes que vienen a disfrutar de la afición de Cazar en La Jara, hasta Mari, regente del Bar del Sierro de La Nava de Ricomalillo, además es tienda y peluquería. ¿Se puede ser más emprendedora, creativa y diversificar con todas sus habilidades de una forma más completa una actividad socioeconómica para seguir dando sostenibilidad y servicio a un pueblo? Gracias a todas ellas y también a los cocineros que con una labor encomiable preparan lumbres, brasas y viandas para estas celebraciones.

Me he traído el maletero con una cesta de la compra natural de productos y alimentos de pueblos con pocas personas, tan ricos como carne de membrillo, huevos de corral, coles para el cocido, aceitunas caseras, lomos de cerdo adobado con la receta tradicional de La Nava de Ricomalillo y dulces típicos de la Panadería Martínez de Fuentelespino, que han viajado conmigo desde el Camino de Cuenca y Uclés a la Comarca de Haro por La Mancha Santiaguista y el Camino de Guadalupe de los Montes de Toledo hasta la Comarca de la Jara. La riqueza gastronómica de los pueblos, los eventos, la cultura, las tradiciones y las celebraciones de las pequeñas comunidades siguen dando vida a las zonas despobladas del país y buen ejemplo de ello son estas dos extraordinarias Comarcas, tierra de riquezas conectada con dos capitales de provincia que son a su vez, Patrimonio de la Humanidad: Toledo y Cuenca. Todo un universo de oportunidades para el desarrollo.

¡Disfrutemos de este tiempo de encuentros que antecede a la Navidad y de todo lo nuestro! Que nunca se pierda. Deseo un 2024 de Trabajo, Tradición, Cultura, Eventos que generen riqueza y buena hostelería, servicios dignos para nuestros pueblos y mucho desarrollo, esa será una gran lotería para las zonas despobladas que entre todos y de forma proactiva podemos avivar.

Yolanda Martínez Urbina es presidenta de la Red de Pueblos Proactivos.