No puede sentirse más satisfecha la alcaldesa de Toledo, Milagros Tolón, por el transcurso de la pasada semana. La Semana Grande de la ciudad de Toledo se ha saldado como una de las “mejores de la historia”,  con un brillante y multitudinario desfile procesional del Corpus Christi, y una variada programación festiva y muy participativa en su honor que ha merecido generales elogios. Por si fuera poca la felicidad de la regidora por el desarrollo de la fiesta grande toledana, coincidiendo en el tiempo, Pedro Sánchez resultaba elegido presidente del Gobierno de España gracias a la moción de censura presentada por el PSOE -que muy pocos confiaban sacar adelante y parecía perdida de antemano- y que fue apoyada de forma excepcional por la mayoría de grupos parlamentarios de la Cámara Baja. Una presidencia que Sánchez pretende mantener por tiempo indefinido con el magro apoyo de 84 diputados y con un Gobierno variopinto con vocación de “consolidación económica”.

Milagros Tolón fue en Castilla-La Mancha una de los pocos socialistas que apoyó abiertamente desde el principio la candidatura del nuevo presidente del Gobierno a la Secretaria General del partido. Un respaldo leal frente a la generalidad oficialista en la región, favorable a Susana Díaz, encabezada por el presidente de la comunidad Emiliano García-Page. Un soporte muy valioso cuando hace algo más de un año y medio la mayoría socialista consideraba a Sánchez un zombi político, y la vieja guardia del partido lo había derrocado en un Comité Federal destinado única y exclusivamente a repudiarlo. Una exclusión que a la postre le ha servido para alcanzar La Moncloa a pesar de los obstáculos dispuestos desde su propia formación. Una valiente determinación de la alcaldesa toledana que desde el primer instante se mantuvo firme y convencida de que Sánchez contaba con el capital más importante: el apoyo de los militantes. Una apuesta ganadora que permitió a Tolón, tras la victoria del candidato, formar parte de la Ejecutiva Federal del PSOE como Secretaria de Economía de las Ciudades.

El éxito de Sánchez -hasta donde pueda durar un gobierno apoyado por tan sólo el 24 por ciento de los escaños de la Cámara- va a permitir a Milagros Tolón proyectarse políticamente más allá de su circunscripción natural como alcaldesa de la ciudad de Toledo. Un cargo que confía revalidar el próximo año sin desafectos y aturullados aliados de gobierno. Hasta tanto, la regidora no pierde su perspectiva sobre Castilla-La Mancha, un territorio donde ya tiene anclado su horizonte político más inmediato.