Mercadeo de fichajes
Estábamos acostumbrados en este país a que el mercado de fichajes lo monopolice el futbol, especialmente en fechas determinadas, y su resonancia mediática lugar preferente en páginas y espacios deportivos. Sin embargo, en los últimos meses, el bazar de traspasos y fichajes se ha incorporado de forma abrupta a la política, donde lleva ya varios capítulos escritos. Un trasiego incrementado ante la proximidad de unas elecciones de incierto resultado, y donde todas las encuestas navegan a ciegas y sin rumbo definido. Un escenario electoral que los ciudadanos contemplan estoicamente, y cuyos decibelios no dejan de subir conforme se acercan los comicios. Un proceso que tiende a la estridencia y el enfrentamiento entre los distintos contendientes.
Ante tamaña zozobra electoral, se viene sucediendo un baile de candidatos entre los diferentes partidos políticos que para sí quisiera Zinedine Zidane en su intento de renovación de las filas del equipo de fútbol que entrena para la próxima temporada. La batalla de las primarias que libraron Pablo Casado, Soraya Sáenz de Santamaría y María Dolores Cospedal no ha hecho más que provocar daños colaterales en el PP, que no ha logrado detener el incesante goteo de fugas en sus filas, día tras día. Una contiende que puede agravarse para los populares tras los resultados de los procesos electorales en curso. El último y más sonado ha sido el de Ángel Garrido. El expresidente de la Comunidad de Madrid ha fichado por Ciudadanos, como antes lo hicieron el exsenador del PP, José Ramón Bauza, y Silvia Clemente, expresidenta de las Cortes de Castilla y León. De la cantera del PP también han salido, en esta ocasión fichados por VOX, Iñigo Henríquez de Luna, peso pesado de la formación de Pablo Casado en Madrid, Fernando Martínez Vidal, concejal del Ayuntamiento madrileño, e Ignacio González Velayos, otro concejal y exconsejero de Metro, entre otras mudanzas.
Mas no son los populares los únicos que vienen registrando bajas y traslados entre sus filas hacia otras formaciones. Ciudadanos también ha pescado en el caladero socialista al exministro Celestino Corbacho para el Ayuntamiento de Barcelona, Soraya Rodríguez, exportavoz en el Congreso, a la Eurocámara, y a Joan Mesquida, exsecretario de Estado de Turismo.
También, en Castilla-La Mancha el mercado de “fichajes” ha estado animado hasta última hora. Aquí tenemos los casos, entre otros, del concejal del PP en Cuenca Ángel Llorens, que ya se entrena con Ciudadanos, como también lo hace Jesús Neira, otro edil conquense que hasta ahora militaba como independiente en las filas del PSOE para encabezar “Candidatura Cuenca”. También han cambiado de camiseta María Jesús Pelayo, exconcejala del PP para liderar la lista de VOX en Alcázar de San Juan, la misma trayectoria realizada por Jesús I. Octavio en la localidad ciudadrealeña.
En definitiva, cambalaches y piruetas que cultivan con fruición algunos individuos que con espurios e interesadas excusas pretenden justificar una perdida repentina de fidelidad y militancia hacia unos colores que hasta hace poco profesaban “a muerte”. Mercenarios y trotamundos de la política que han cambiado de chaqueta a "ultima hora y de mala manera", como los ha definido el presidente del PP regional, Francisco Núñez, y que se han visto desplazados por otros candidatos, ni mejores ni peores, que también reclaman su lugar en el reparto del generoso mercado laboral de la política. Un bazar donde el amor y la fidelidad a unos colores resultan cada vez algo más infrecuentes y donde las capacidades personales, si las hubiera, son puestas a disposición del mejor postor.