El próximo miércoles la junta directiva de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) convocará  elecciones a la presidencia de la patronal española. Unos comicios que el actual presidente, Juan Rosell, propondrá se celebren el 21 de noviembre, y a los que no podrá presentarse al poner fin a los dos mandatos de cuatro años que él mismo impuso cuando la CEOE cambio sus estatutos. De esta forma, dará comienzo un proceso electoral en el que casi todos coinciden en señalar al actual vicepresidente, Antonio Garamendi, como claro favorito al cargo.

Garamendi ya fue candidato al cargo hace cuatro años, unas elecciones que tan sólo perdió por 33 votos frente a Rosell, debido a la escisión que hubo en la patronal madrileña. En esta ocasión, las circunstancias se manifiestan claramente a favor del presidente de la Confederación de la Pequeña y Mediana Empresa (CEPYME), aunque se mantiene la incógnita del actual presidente de la patronal catalana, Joaquim Gay de Montellá, que también puede aspirar el puesto de presidente de CEOE. Ante esta incertidumbre, y la de otros posibles candidatos a la elección, distintas organizaciones ya han comenzado a mostrar sus preferencias por el candidato Garamendi. Son los casos de las patronales madrileña, del País Vasco, o la Comunidad Valenciana, de las sectoriales de la electricidad, bancaria, metal, químicas y alimentación, además de la propia CEPYME que el candidato preside. Tienen derecho a voto en estas elecciones 225 federaciones y confederaciones, de las que 64 son territoriales autonómicas y provinciales y 161 sectoriales de ámbito nacional.

En las anteriores elecciones a la presidencia de CEOE, el presidente de CECAM, Ángel Nicolás, jugó un papel muy activo a favor de Antonio Garamendi, al que confió los votos de la organización que representa en Castilla-la Mancha. No obstante al fracaso electoral de hace cuatro años por tan reducido margen de votos, el presidente de CEPYME agradeció la contribución de su amigo Nicolás nombrándole vicepresidente de la organización empresarial. Se espera por tanto que, una vez convocadas definitivamente las elecciones, CECAM manifieste públicamente su unánime apoyo al candidato Garamendi, y pueda sumar también los votos de la patronal castellano manchega a la larga lista de organizaciones ya confirmadas. Una circunstancia que, de confirmarse la victoria del aspirante, podía suponer también el ascenso de Ángel Nicolás dentro de la estructura de la gran patronal española de la que ahora tan sólo es vocal.