La Pregunta

¿Qué pueblo de Toledo ha encontrado unas piedras que podrían cambiarlo todo?

25 septiembre, 2018 00:00

El monumento megalítico “no catalogado” localizado en la localidad toledana de Totanés puede ser un revulsivo para la economía del municipio, “ya que, seguro, generará empleo y riqueza a través del turismo”. Lo ha afirmado de este modo el consejero de Educación, Cultura y Deportes, Ángel Felpeto, antes del inicio de las actividades de ‘La noche de Equinoccio’, celebradas en Totanés, donde también ha reconocido que este hallazgo, único y singular, es un claro ejemplo de la unión entre el patrimonio medioambiental y cultural, dos representaciones muy comunes en la Comunidad Autónoma.

Paralelamente a la celebración en la que participó el consejero, el diario El País publicaba el gran hallazgo de las piedras de Totanés, que comparan con el famoso y enigmático monumento megalítico de Stonehenge, construido al sur de Inglaterra hace 5.000 años. Los arqueólogos de Cota 667 creen haber encontrado una estructura similar que data de la misma época. "Un hallazgo que puede cambiar la vida de esta pequeña localidad toledana", afirma el diario de Prisa, igual que Felpeto.

Las piedras están dispuestas en circunferencia dentro de La Dehesilla, una finca particular de 107 hectáreas divididas por una carretera secundaria que conecta Totanés con Pulgar. En su margen derecha, tal como lo describe El País, hay tres hectáreas repletas de piedras, estériles para la agricultura. 

“Es un descubrimiento muy importante porque se trataría del único crómlech de la meseta”, han explicado los arqueólogos de Cota 667 al diario madrileño. En la península Ibérica solo hay algo parecido en Oiartzun, Gipuzkoa, y en la región de Évora, en el sur de Portugal. El equipo investigador está trabajando ya en el hallazgo, que tendrán que excavar. “No hay dudas de que es una estructura antrópica, pero nos enfrentamos al problema de que pudo ser construido por el hombre en el siglo XVIII, por ejemplo”. Por eso es necesario datar las piedras, que enmarcan entre 5.000 y 2.500 años antes de Cristo, un momento en el que las comunidades dejan de ser nómadas y se convierten en sedentarias.

Si se confirma que es una construcción humana de hace cuatro o cinco milenios, Castilla-La Mancha tendrá una nueva joya patrimonial del Neolítico y el pueblo de Totanés un mega motivo para ser visitado. Habrá que esperar.