Un total de 2.766 empresas en España han trasladado su sede social a otra comunidad durante el primer semestre del año 2019, según el Estudio sobre Cambios de Domicilio publicado por Informa. Esta cifra de salidas representa un incremento del 8 % respecto al segundo semestre del año anterior, en el que se habían recortado casi a la mitad.
En Castilla-La Mancha, durante los seis primeros meses de este año, se han inscrito 151 nuevas empresas, de las que 100 procedían de Madrid, 14 de Valencia, 13 de Cataluña y 11 de Andalucía, como principales orígenes de las empresas que han trasladado su domicilio a esta región. Por el contrario, también en el primer semestre del año, 143 empresas de esta Comunidad han cambiado su domicilio a otros territorios, principalmente a Madrid donde se han trasladado 97, 23 a Valencia, y 7 a Andalucía.
Un saldo positivo durante este periodo de tiempo de ocho empresas, aunque la diferencia por ventas es muy negativa. Las que se van facturan 328,6 millones, mientras que las que vienen lo hacen por 36,1 millones
Cataluña frena su éxodo
Cataluña, tras un periodo marcado por la fuga de empresas originada por el proceso independentista, deja de ser la comunidad con mayor saldo negativo entre entradas y salidas de empresas. Pierde 116 en este semestre y es superada por las 164 que recorta Andalucía. 440 compañías han dejado la comunidad catalana frente a las 324 que se han trasladado allí. Señalar que 50 de estas empresas han regresado a Cataluña tras cambiar su domicilio social a Madrid en 2017 o 2018.
Madrid, a pesar de ser la comunidad de donde más empresas salen, 743, es también a la que más empresas llegan, 1.082, lo que hace que tenga el mayor saldo positivo, 339. Pero la facturación de las compañías que se han ido este semestre supera a las entradas, liderando el saldo negativo al restar 721 millones de euros este semestre.
Según Nathalie Gianese, directora de Estudios de Informa D&B: “Parece que ya ha quedado atrás el notable incremento en los cambios de domicilio de empresas en España que se inició a principios de octubre de 2017, debido al proceso independentista catalán: si en el primer semestre de 2018 fueron 4.369 las compañías que decidieron trasladar su sede social a otra autonomía, en el mismo periodo este año la cifra se reduce a 2.766”.