El precio del pacto
Así que se trataba de eso. Tanto hablar de privilegios, prebendas, derroche del dinero público y resulta que bajo cuerda - con la calorina sofocante de agosto y el despiste general porque Castilla-La Mancha se haya convertido en un campo de pruebas para un futuro gobierno del PSOE y Podemos- en el fondo lo que se estaban garantizando los nuevos consejeros de la formación morada era su pensión .
Emiliano García Page y José Molina , aprovechando el lío del gobierno de coalición, han disimulado una reforma en el proyecto de ley que regirá la gestión de la Administración para acceder por la vía rápida a las mejores posiciones en su categoría de funcionarios cuando abandonen sus puestos y una mejora sustancial la en las pensiones.
José García Molina es ya vicepresidente segundo de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha e Inmaculada Herranz consejera, gracias a un pacto no exento de polémica y de lecturas contradictorias, tanto en el seno del PSOE como de la formación morada. Creíamos que su incorporación era el precio a pagar por los socialistas para que se desbloquearan los presupuestos, una actuación desesperada, in extremis ante la paralización de cualquier actuación de la Junta en lo que va de año, pero había sorpresa final .
Lo que no sabíamos es que el caramelo del poder estaba relleno y que además de una subida sustancial en el sueldo, el coche oficial, el despacho, las secretarías y otras fruslerías se había negociado bajo cuerda una mejora en las retribuciones para cuando abandonen el cargo político y vuelvan a su anterior trabajo en la administración. No sabíamos que ademas, a partir de ahora, podrán optar a cargos a los que no podrían aspirar sólo por su cualificacion y también
garantizarse la pensión máxima. La norma no solo es ad hoc para los nuevos consejeros ya que tiene carácter retroactivo y a ella podrían acogerse todos los cargos que reingresen a su anterior ocupación, siempre que lo hayan hecho después de la creación de la autonomía, en 1983.
Este privilegio puede que no sea ilegal pero es inmoral, como han denunciado los sindicatos y también la oposición .
«Mediante formación y antigüedad sólo se puede llegar al nivel 25, y del nivel 25 al 30 sólo se llega mediante libre designación o a través de carrera política. Con esta medida, se consolidarán dos niveles cada dos años. Y, además, cuando regresen a sus puestos públicos, lo harán con el nivel consolidado. Esto supone una «paga de productividad vitalicia por los servicios prestados», que en el caso de los trabajadores públicos de mayor nivel pueden suponer hasta 6.000 euros más al año, declaró a los periodistas Victoria Ortiz, representante del CSIF de Castilla la Mancha, y tiene razón.
Hace unos meses entrevisté a Pablo Iglesias para El Economista cuando acababa de salir una encuesta donde no salía bien parado en la valoración de los ciudadanos que desconfiaban de su gestión en caso de gobernar. Le pregunté por qué se teme un gobierno de Podemos y hoy, con la conformación del primer gobierno de coalición entre los dos partidos, viene muy al caso su respuestas .
P.- Oiga, ¿usted es consciente de que algunos les tienen miedo? ¿No preferirían que les respetasen a que les temiesen?
R.- Si damos miedo a alguien es a una minoría de privilegiados, a la “trama” y esos desde luego tiene motivos para temernos, por eso nos espían las cloacas del estado y hacen juego sucio. Lo que da miedo a la gente no es Podemos. Es quedarse sin trabajo, que les desahucien, no tener asegurado un futuro para sus hijos, ni sus pensiones. Nosotros hemos venido para gobernar y cambiar las cosas. Somos una fuerza política de gobierno, que hemos demostrado que somos capaces de gobernar administraciones muy difíciles como las principales capitales españolas, y por eso nos respetan, no nos temen.
P.- ¿ Como se definiría ideológicamente?, porque le han llamado comunista, marxista, leninista y de todo…
R.- Yo diría que me identifico mucho con el socialismo de Allende. Aunque me quieran poner algunas etiquetas que tienen mucho que ver con la historia del siglo XX, y que yo respeto enormemente, ahora no tiene nada que ver con el programa que planteamos . Quieren asustar a la gente como se hacía en el franquismo, pero tenemos una sociedad más moderna, con unas nuevas generaciones que no han crecido en el miedo, y no se dejan aterrorizar por cuentos de la bruja, ni con demonios con cuernos.
Ya veremos como termina, al final, el experimento de Castilla-La Mancha pero si de verdad Podemos quiere normalizar la relación de su partido con los ciudadanos, y que les vean como una opción de gobierno a medio plazo, no pueden dar la sensación de que el precio del pacto son privilegios. Eso de “consejos vendo para mí no tengo” no cuela ni con ellos ni con los socialistas de Page que se han hinchado a descalificar a quienes ahora han convertido en sus socios.