Castilla-La Mancha, partidaria de aumentar una hora de Educación Física

El Gobierno de Castilla-La Mancha se ha mostrado de acuerdo con aumentar una hora de Educación Física en los colegios públicos de primaria, como sugirió el Gobierno central, aunque ha pedido al Ejecutivo que concrete esta medida en una norma y que se precise la financiación con la que se llevaría a cabo en las comunidades autónomas.

Así ha reaccionado en declaraciones a Europa Press el director general de Juventud y Deporte, Juan Ramón Amores, a la sugerencia hecha por el secretario de Estado de Educación, Formación Profesional y Universidades, Marcial Marín.

"Estamos encantados, es necesario porque es un grave problema que nos tenemos que tomar en serio", ha asegurado Amores, que ha señalado, tras las palabras de Marín, que "no vale solo con invitar" sino que el Ministerio de Educación se tiene que plantear regularlo "con una norma y ver cuál sería la financiación concreta de la misma" y de "dónde habría que quitar" para implantar una hora más de esta asignatura.

A su juicio, el mejor marco para debatirlo con las comunidades autónomas es convocar una reunión, ya que en la última que mantuvieron con representantes del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte se expuso la intención del Gobierno de llevar a cabo esta medida, pero ahora "falta clarificar" y que esta sugerencia "no solo se quede en un anuncio".

Sobre la hipotética implantación de esta medida en Castilla-La Mancha, el director general de Deportes ha indicado es una región con "una gran diversidad" de territorios y "muchos centros", una población "muy distinta" en "más de 900 pueblos", por lo que ha indicado que si la medida llega a concretarse tocará a las comunidades autónomas decir si se puede asumir.

Medidas en Castilla-La Mancha

Juan Ramón Amores ha destacado que en Castilla-La Mancha se ha adelantado terreno en ese aspecto a través de los Proyectos Escolares Saludables y las actividades de iniciación y promoción deportiva, entre otras iniciativas.

A su juicio, toda la comunidad educativa debe implicarse para combatir el sedentarismo y la obesidad en edad escolar, así como los clubes y los ayuntamientos, ya que no es una tarea que solo corresponda al profesor de Educación Física.

Amores ha puesto como ejemplo el recreo, con dos horas y media a la semana, un espacio en el que se debe fomentar que los alumnos "se muevan" por medio de actividades, así como acostumbrarles a hábitos alimentarios saludables.