Castilla-La Mancha estará nuevamente este viernes en riesgo por altas temperaturas
Un total de 24 provincias, dentro de las que se incluyen todas las de Castilla-La Mancha, estarán este viernes, 18 de agosto, en riesgo por temperaturas altas, que serán significativamente elevadas en zonas del interior nordeste y de la mitad sur peninsular, mientras que sólo se esperan lluvias débiles en el norte de Galicia y Cantábrico occidental, según la predicción de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET).
Las provincias de Córdoba y Jaén volverán a estar en riesgo naranja por el calor y se prevé que se superen los 38ºC en el valle del Guadiana y del Tajo y los 40ºC en el Guadalquivir.
Mientras tanto, las provincias de Granada, Huelva, Sevilla, Ávila, Salamanca, Girona, Lleida, Tarragona, Madrid, Valencia, Mallorca, Menorca, y toda Extremadura, Aragón y Castilla-La Mancha estarán en riesgo amarillo por este fenómeno.
No obstante, pese estos avisos junto con el ascenso de las temperaturas en el Mediterráneo y norte de Baleares, los termómetros bajarán en Canarias, Galicia, Cantábrico, alto Ebro, Navarra y norte de Castilla y león, pudiendo ser localmente notable en puntos del interior.
En cuanto a las lluvias, además, es probable que se desarrollen nubes de evolución diurna en zonas de montaña del interior nordeste peninsular, que pueden producir chubascos y tormentas en Pirineos, sin descartarlos de forma dispersa y ocasional en el Sistema Ibérico y depresiones del nordeste.
En el resto del país habrá un predominio de tiempo estable y cielos poco nubosos, con algunos intervalos nubosos matinales en el Estrecho, Alborán y litorales sudeste y de Valencia. En los archipiélagos, el tiempo será estable con cielos poco nubosos o despejados.
Se espera régimen de alisios en Canarias, fuerte en las islas de más relieve y con intervalos de fuerte en el resto. El viento soplará de componente noroeste rolando a nordeste en los litorales gallego y cantábrico y se prevé temporal de levante en el Estrecho.
En el resto del país, el viento será flojo en general, con predominio de la componente oeste en la vertiente atlántica peninsular y la componente este en el área mediterránea.