Digital Castilla

Digital Castilla

Región GUADALAJARA ACOGE LA PRESENTACIÓN DEL INFORME

Un estudio de la UCLM denuncia el "desastroso" impacto socio-económico del trasvase Tajo-Segura en Castilla-La Mancha

5 marzo, 2018 16:30

Un estudio del impacto socio-económico del trasvase Tajo-Segura sobre los municipios ribereños de Entrepeñas y Buendía elaborado por la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) ha constatado los efectos "desastrosos" que éste ha tenido al impedir el desarrollo de estas zonas castellano-manchegas. Así lo han señalado este lunes en la presentación del informe en Guadalajara sus autores, Enrique San Martín, profesor de la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales de la UNED; Beatriz Larraz, profesora de la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de la UCLM, y la consultora independiente Nuria Hernández-Mora, que han estado acompañados del presidente de los pueblos ribereños, Francisco Pérez.

Hernández-Mora ha explicado que el estudio recoge que "se ha perdido la oportunidad de tener un recurso excepcional como motor de un desarrollo que no se ha producido". A esto ha sumado que, para paliar las zonas anegadas en los años 60, se planificaron riegos que nunca se pusieron en marcha y abastecimientos en precario que no se han terminado en 50 años, así como puentes que no se han concluido hasta los años 90 para mejorar las comunicaciones derivadas de carreteras cortadas.

"Nunca ha sido un prioridad de la administración garantizar el desarrollo social y económico de esta región", ha apuntado Hernández-Mora, a lo que San Martín ha apostillado que del estudio se desprende que "una región ha sido favorecida en detrimento de la otra bajo la premisa de que el trasvase, como cualquier otra obra hidráulica, siempre es rentable". Este "desastre", ha dicho Pérez, es el efecto directo del trasvase, que se pone también de manifiesto en datos como la población.

Menos población

En este punto, Beatriz Larraz ha recordado que, si bien en los años 60, con los embalses se logró frenar el éxodo inicial, al comenzar el trasvase se ha producido un descenso del 21 % de la población con ratios de densidad por habitante por debajo de los de la conocida como 'España despoblada'. Así en la zona de los municipios ribereños se registran 6,3 habitantes por kilómetro cuadrado frente a los 7 de la España despoblada, pasando de 25.000 habitantes cuando se inició el trasvase a 10.000 en la actualidad.

Tal y como han explicado los autores del informe, los embalses dieron una oportunidad de crecimiento y desarrollo en torno al turismo y los servicios de recreo, que luego vieron desaparecer con el trasvase. Prueba de ello, según el responsable de los municipios ribereños, es que sólo desde 2010, entre la crisis y la falta de agua, han cerrado el 30 por ciento de los establecimientos y el 50 por ciento de las plazas de alojamiento turístico, lo que ha afectado directamente a la renta, que ha caído un 20 %.

El informe compara a los embalses de Entrepeñas y Beleña con el de San Juan en Madrid, ya que comparten similitudes, si bien recalca que su evolución ha sido "radicalmente diferente", ya que, en el caso del embalse madrileño, la población de su entorno ha crecido más de un cien por cien, ha generado riqueza y desarrollo y se ha convertido en una zona referente de ocio y turismo.