Tráfico intenso en las carreteras de la región con motivo de los desplazamientos navideños
La circulación por una parte de la red viaria está siendo intensa esta tarde en las primeras horas de la operación especial de tráfico con motivo de la Navidad, con retenciones en las salidas de Madrid hacia Valencia, Toledo y Córdoba.
Así, según los datos de la Dirección General de Tráfico (DGT), poco antes de las siete de la tarde la A-3 soportaba retenciones en sentido salida a la altura de Rivas-Vaciamadrid; la A-4 en el barrio de San Cristóbal de la capital y en Pinto; la A-5 en el enlace con la M-40 y en Arroyomolinos, y la A-42 en ambos sentidos en Fuenlabrada.
En varios tramos de la carretera de circunvalación M-40 también había circulación lenta, mientras que en la provincia de Toledo un accidente congestionaba el tráfico en Camuñas en dirección a Córdoba.
En el norte, la A-1 sufría retenciones en la provincia de Álava en Iruña de Oca y la AP-8 en Zaldibar (Vizcaya) hacia Cantabria. Mientras, en el este Valencia era la provincia más afectada, con circulación lenta en la A-7, la V-21 o la CV-30.
Y en Andalucía, la A-44, congestionada en ambos sentidos, tenía hasta 10 kilómetros de atasco en Granada. A lo largo de la jornada, las protestas de los independentistas radicales por la celebración del Consejo de Ministros en Barcelona han afectado a varias vías, que han sido cortadas, como la AP-7 y la N-340.
Tráfico ha puesto en marcha un dispositivo especial para regular los 18,3 millones de viajes previstos hasta el próximo 7 de enero, un periodo en el que se intensificarán los controles de velocidad y, sobre todo, los de alcohol y drogas.
Dieciocho días por delante que la DGT ha estructurado, como otros años y coincidiendo con los principales días festivos, en tres fases: la primera, denominada "Navidad", arranca hoy, y culminará la medianoche de Navidad, el próximo martes.
Según Tráfico, en la primera fase se prevén 5,3 millones de desplazamientos tanto de largo como de corto recorrido, en tanto que en la segunda fase del dispositivo "Fin de Año" se esperan 4,8 millones de viajes entre el viernes 28 y el 1 de enero.
La última fase, la de "Reyes", se extenderá del 4 de enero al 7, jornada festiva en la mayoría de comunidades autónomas.
Junto a radares y pruebas de alcoholemia estarán vigilantes los guardias civiles de Tráfico, los más de 13.000 empleados de las empresas de conservación de carreteras y 12 helicópteros desde el aire.
También apoyarán el dispositivo los 2.440 paneles de mensaje variable y las 1.722 cámaras de televisión en las carreteras.