Pablo Casado pide a Vox que no se presente las elecciones generales en cuatro provincias de Castilla-La Mancha
El líder del PP, Pablo Casado, ha pedido este miércoles a los "partidos nuevos", en clara referencia a Vox, que hagan una "reflexión" sobre si conviene que concurran o no en las circunscripciones pequeñas en las elecciones generales de abril, ya que, según ha dicho, eso hará que se "divida el voto" del centro-derecha y, por lo tanto, salga beneficiado el PSOE y Podemos.
Así se ha pronunciado en un acto en Zaragoza con afiliados del PP, donde ha puesto en valor que el Partido Aragonés (PAR) haya tomado la decisión "responsable" de no presentarse a las generales -concurrió con el PP en las de 2015 y las de 2016 - para que no haya "dispersión del voto constitucionalista". A su entender, "es algo digno de agradecer". En el caso de Castilla-La Mancha la propuesta de Casado afectaría a cuatro provincias: Ciudad Real, Albacete, Cuenca y Guadalajara.
"Lo que tengo que decir es que ojalá otros partidos también hicieran este análisis de responsabilidad y es pensar que en aquellas convocatorias electorales en las que no van a tener representación en algunas circunscripciones, si merece la pena dividir el voto para que algunos escaños pasen al PSOE y a Podemos", ha manifestado.
En este punto, ha explicado que hay provincias "de menos de seis escaños", que suponen "casi la tercera parte del Congreso", en las que los últimos escaños de esas circunscripciones ("unos 20") "basculan entre el PP, el PSOE o Podemos". En Castilla-La Mancha, sólo la provincia de Toledo quedaría fuera de la propuesta de Pablo Casado.
Por eso, ha insistido el líder del PP en que "la reflexión que hay que hacer es si merece la pena" que "partidos nuevos", en alusión a Vox, vayan a permitir una fragmentación del voto constitucionalista en esas provincias, de forma que esos escaños vayan a "engrosar las filas de la izquierda radical, en manos de Torra, los independentistas y los batasunos".
28 provincias
Según ha explicado el diario El Mundo, la propuesta de Pablo Casado a Vox afecta a 28 provincias en toda España que reparten menos de seis escaños, para no beneficiar al PSOE por la división del electorado conservador, aunque la formación de Santiago Abascal entró al cuerpo a cuerpo con un desafío: que el PP no se presente tampoco en aquellas circunscripciones donde las encuestas apuntan a un posible sorpasso. Después Vox ha dejado claro que se presentará en todas las provincias.
En todo caso, Génova ha elaborado un argumentario, al que ha accedido El Mundo, en el que deja clara la nueva estrategia: «Todos los votos son útiles, pero si estamos preocupados por el riesgo de que pueda seguir gobernando Sánchez con los separatistas y con Podemos, tenemos que ser responsables y aglutinar el voto en la única opción que puede liderar un gobierno responsable: la de Pablo Casado».
Bajo el título Pablo Casado o el Gobierno Frankenstein, el documento defiende que en las 28 provincias que reparten cinco o menos escaños no merece la pena votar a la formación de Santiago Abascal, ya que necesitaría «un umbral mínimo mayor al 15%» de las papeletas para lograr un diputado, por la Ley D'Hondt.
El documento del PP especifica las 28 circunscripciones en las que quiere que Vox dé un paso atrás. Y si no, le culpará del ascenso de Pedro Sánchez. Son las que tienen cinco escaños (Cantabria, Castellón, Ciudad Real, Huelva, Jaén, Navarray Valladolid), las de cuatro (Álava, Albacete, Burgos, Cáceres, Lérida, Lugo, Orense, León, La Rioja y Salamanca), tres diputados (Ávila, Cuenca, Guadalajara, Huesca, Palencia, Segovia, Teruel y Zamora), Soria (en la que se adjudican dos diputados) y Ceuta y Melilla, con uno cada uno. Entre todas ellas suman 103 sillones parlamentarios, casi un tercio de los 350 del Congreso de los Diputados.