FOTOGALERÍA | Francisco Calvo Cirujano recibe la Cruz de Honor de San Raimundo de Peñafort en las Cortes
El letrado mayor de las Cortes de Castilla-La Mancha, Francisco Calvo Cirujano, ha recibido este lunes de manos del presidente regional, Emiliano García-Page, la Cruz de San Raimundo de Peñafort.
En un acto presidido por el presidente de la Cámara regional, Jesús Fernández Vaquero, García-Page ha resaltado las cualidades de Calvo Cirujano, que durante 21 años ha ejercido como letrado mayor, según ha informado el Gobierno regional en nota de prensa.
El jefe del Ejecutivo autonómico ha subrayado su papel "clave" para que la región "haya sido muy seria en su producción normativa y en sus pleitos con el Estado". "No podemos decir que de estas Cortes ha salido una normativa sabiendo, a priori, que es injusta o prevaricadora", ha asegurado García-Page, quien ha añadido que con este reconocimiento se premia la seriedad de las normativas de las normativas del Parlamento regional.
Calvo Cirujano se convirtió en 1987 en el primer letrado jefe del Gabinete Jurídico de la Junta, cargo que desempeñó hasta 1993 cuando fue nombrado por la Mesa de las Cortes de Castilla-La Mancha letrado mayor de la Cámara.
En los inicios de su carrera profesional en la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha fue director general de la Función Pública y, desde esta responsabilidad, impulsó en 1985 la aprobación de la primera Ley regional de la Función Pública. Una tarea que el presidente regional ha destacado de manera especial, "pues ya se sabe lo espinoso, conflictivo y delicado que es este universo", ha reseñado.
Durante su intervención, García-Page ha puesto de relieve la trayectoria e importancia de las personalidades que a lo largo de los años han recibido este reconocimiento, "que pueden atestiguar que no se da por capricho".
No en vano, la han obtenido conocidos juristas y políticos como Cristina Alberdi, Eduardo Aunós, Soledad Becerril, Juan Alberto Belloch, Joaquín Calvo Sotelo, Manuel Fraga, Antonio Garrigues Walker, Victoria Kent, Tomás de la Quadra-Salcedo, Blas Piñar o el arzobispo de Toledo Enrique Pla y Deniel.
También el presidente de Gobierno del régimen Carlos Arias Navarro; el fundador del Opus Dei, José María Escrivá de Balaguer; la actual ministra de Defensa en funciones, Margarita Robles; la que fuera fiscal general del Estado, Consuelo Madrigal; o la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena.
Un premio, ha añadido el presidente, con el que se reconoce "una labor y una trayectoria" y que en el caso de Calvo Cirujano "no ha sorprendido a nadie", lo cual supone en sí mismo una parte del galardón, "y pone de manifiesto el currículum sostenido y tenaz de nuestro homenajeado".
Finalmente, el presidente castellano-manchego ha reconocido que esta región ha pasado por coyunturas profesionales "cruciales" y que, a pesar de ser esta una autonomía joven, "se ha tomado muy en serio sus instituciones", algunas de las cuales se ha mostrado partidario de recuperar como el Consejo Social con la voluntad de que "represente, aúne y discipline" el diálogo entre los principales agentes sociales.
"La huella imborrable" de Calvo Cirujano
De su lado, el presidente de las Cortes de Castilla-La Mancha, Jesús Fernández Vaquero, ha destacado que Calvo Cirujano, al que ha considerado "un amigo", ha trabajado "de manera ejemplar" y tiene el reconocimiento dentro y fuera del Parlamento autonómico, donde ha dejado una "huella imborrable", según han informado las Cortes en nota de prensa.
"La condecoración te llega en el momento justo, cuando tú mismo decidiste hace apenas un año dejar el cargo de letrado mayor de las Cortes, al cumplir los 25 años de trabajo en el Parlamento regional. Una fecha que tú consideraste simbólica y, además, es de valorar cómo has facilitado el relevo y cómo sigues ayudando al buen funcionamiento de la casa desde tus nuevas funciones en los servicios jurídicos, aunque no tengas tan altas responsabilidades", ha destacado.
Del mismo modo, ha apuntado su papel "en la consolidación del desarrollo del Estado de las Autonomías en el campo del Derecho y de la organización administrativa" como director general de la Función Pública de Castilla-La Mancha, cargo desde el que impulsó en 1985 la aprobación de la primera Ley regional de Función Pública.
"Ayudaste a la consolidación del sistema democrático en beneficio de la sociedad castellano-manchega", ha valorado y ha vuelto a ensalzar su vida "entregada con pasión al servicio público, a Castilla-La Mancha, al derecho y a la justicia".