CCOO y UGT piden salir a las calles de Castilla-La Mancha el 11-F para exigir la subida del Salario Mínimo
Los sindicatos CCOO y UGT en Castilla-La Mancha han llamado a la participación en las concentraciones convocadas para el 11 de febrer en todas las capitales de provincia para exigir el incremento del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) y el inicio de la negociación para derogar las reformas laborales y la de las pensiones de 2013, pero han destacado la importancia de movilizarse “con responsabilidad” por la pandemia.
Bajo el lema ‘Ahora sí toca’, las concentraciones tendrán lugar ante las delegaciones y subdelegaciones del Gobierno de España en las cinco capitales de provincia de Castilla-La Mancha, una región en la que cuatro de cada diez personas se encuentra “en el umbral de la pobreza, cuando no por debajo” y 80.0000 trabajadores cobran el SMI o menos.
Así lo han explicado este lunes en una rueda de prensa telemática el secretario general de CCOO en la región, Paco de la Rosa, y Carmen Campoy, miembro de la Comisión Gestora de UGT, quienes han destacado la importancia de que el Salario Mínimo Interprofesional se sitúe en el 60 % del salario medio neto.
Campoy ha asegurado que “no tiene sentido” aplazar el aumento del SMI y que cada día que pasa sin que se incremente es “un día de injusticia social”, máxime cuando todos los países de la Unión Europea lo suben.
Asimismo, ha incidido en la necesidad de exigir la derogación de las reformas laborales, que a su parecer, han traído consigo “bajos salarios y trabajos cada vez más cortos, volátiles e inseguros”.
“Ninguna de las dos reformas, especialmente la de 2012, tienen ya razón de ser”, ha afirmado la dirigente sindical, quien ha recordado que esta última se llevó a cabo “bajo la excusa de superar la crisis de 2008” y se ha mantenido en la etapa de recuperación económica, pero ha lamentado que no solo los salarios no se han recuperado, sino que se han devaluado, al tiempo que se ha destruido empleo y han empeorado las condiciones laborales.
De igual modo, ha reclamado la derogación de la reforma de las pensiones de 2013 que, a su juicio, “condenó a los pensionistas presentes y futuros a un empobrecimiento continuo” y a una pensión media que ronda los 940 euros mensuales, “insuficiente, a su modo de ver, teniendo en cuenta los precios de suministros esenciales como la electricidad.
Además, frente a aquellos que piensan que “no es el momento más adecuado” para movilizarse, De la Rosa ha subrayado que los argumentos “pesan más que suficiente para justificar la movilización”, pero ha hecho hincapié en la importancia de salir a la calle “con responsabilidad” y cumpliendo las medidas impuestas para frenar la expansión de la covid-19.
“Sobran las razones. Es el momento oportuno y adecuado para volver a dar protagonismo a quienes han sido protagonistas en tiempos difíciles”, ha defendido el dirigente de CCOO, quien ha hecho hincapié en que los trabajadores han pagado las consecuencias de la crisis desde 2008.
De la Rosa también ha denunciado que las pensiones en Castilla-La Mancha son casi 400 euros más bajas que la media nacional y que buena parte de la población necesita un complemento a mínimos, a la vez que se ha preguntado “por qué no es posible hacer una reforma del Pacto de Toledo”.
Se ha mostrado convencido de que esto no supondría la quiebra del sistema de Seguridad Social porque hay elementos que, en su opinión, “podrían hacerlo sostenible”, entre ellos, eliminar cargas ajenas como el sueldo de los empleados y, en este sentido, ha recordado que el salario de los funcionarios está contemplado en los Presupuestos Generales del Estado (PGE).
Respecto a las reformas laborales, ha dicho que la de 2012 fue “el mayor desacierto” que se ha hecho y ha lamentado que el 92 % de los contratos que se realizan en España son “eventuales, precarios y de muy corta duración” y que apenas un 8 % son indefinidos, aunque pueden eliminarse “con un coste prácticamente cero”.
El responsable sindical también ha destacado la necesidad de “echar una mano” a los trabajadores en Expediente de Regulación de Empleo Temporal (ERTE) o sin empleo y, en este punto, ha apelado al Gobierno regional para contar con un Ingreso Mínimo Vital, “no solo el del Estado” y una ayuda a la conciliación de la vida laboral y familiar.