Las elecciones autonómicas del 28M han tenido un claro ganador en Castilla-La Mancha: el PSOE de Emiliano García-Page, que volverá a gobernar con mayoría absoluta. Sin embargo, los tres partidos políticos que han obtenido representación en el Parlamento regional tienen motivos para estar contentos... al menos en el aspecto económico.
Como el resto de comunidades autónomas, Castilla-La Mancha reparte subvenciones como compensación a los gastos electorales de los partidos. Aquí se entregan 12.811 euros por cada uno de los 33 escaños (lo que implica una partida total de casi 423.000 euros) y cada voto recibido se 'paga' a 60 céntimos de euro.
De esta manera, según los resultados electorales de este domingo, al PSOE de Castilla-La Mancha se le ingresarán más de 506.000 euros. Casi 218.000 euros por los 17 diputados regionales que han conseguido y unos 288.600 euros por los 481.000 votos.
Por su parte, el PP obtendrá en torno a 370.000 euros. Casi 154.000 euros por los 12 escaños y 216.000 euros por los 359.000 votos.
Y Vox, que ha entrado por primera vez en las Cortes de Castilla-La Mancha, recibirá 219.000 euros. Algo más de 51.000 euros por sus cuatro escaños y poco más de 82.000 euros por sus 137.000 votos.
Castilla-La Mancha puede considerarse una tierra austera en este aspecto. Además de tener uno de los parlamentos más reducidos de España es la segunda región que más barato subvenciona el escaño, solo por delante de Canarias, que lo 'paga' a 11.237 euros.
Navarra será la que invierta más (1,13 euros) por cada voto, seguida de Madrid (1,11 euros) y La Rioja (1,08 euros), mientras que al lado contrario se sitúa Canarias, que solo abonará entre 10 y 20 céntimos por voto, junto con Baleares (57 céntimos por papeleta) y Castilla La-Mancha (60 céntimos).